El hallazgo de hidrocarburos en Cerro Padilla “es una ocurrencia o indicio, y no un yacimiento”

La empresa Schuepbach Energy Uruguay, el Ministerio de Industria, Energía y Minería y Ancap anunciaron el hallazgo de hidrocarburos en “el primer pozo exploratorio ‘onshore’ (en tierra) en 30 años en Uruguay” y reconocían que “aún falta determinar si el descubrimiento es comercializable”.
“El escueto comunicado de Presidencia, que además contiene errores, dice que en ciertos intervalos del pozo tienen una medición de receptividad eléctrica en la roca. Cuando contiene receptividad, es menor porque tiene sales y cuando hay petróleo es mayor”, por tanto “allí detectaron intervalos de dos metros, que son areniscas, cuyos poros estarían aparentemente rellenos de hidrocarburo, es decir, petróleo y no de agua”, explicó a EL TELEGRAFO, el presidente de la Sociedad Uruguaya de Geología, Claudio Gaucher.
El docente grado 3 de la Universidad de la República añadió que “esto se confirma con estudios de fluorescencia, o de iluminación con luz ultravioleta a las muestras, y si éstas contienen petróleo darán un tono entre amarillo o anaranjado que es el distintivo de los hidrocarburos líquidos. En todo caso, es una ocurrencia o indicio, y no un yacimiento”.
NADA NUEVO
El experto sanducero resaltó que el anuncio efectuado por el gobierno “no es nuevo porque entre 2013 y 2014, la empresa había realizado dos perforaciones en el mismo lugar (Cerro Padilla), inclusive uno que llegó a una profundización mayor (860 metros) y en ese entonces se anunció la existencia de indicios de hidrocarburos. O sea, lo mismo que se anuncia ahora, ya lo hizo la empresa hace tres años en un comunicado a través de su página web”.
La ministra de Industria, Carolina Cosse, llamó a “ser muy prudentes y no marearnos”, en tanto restan “muchos análisis por hacer” y anunció que no se abundará en información, sino que se remitirá a lo informado por Presidencia. Sin embargo, “desconocemos la motivación del anuncio porque no es una noticia, sino que la novedad hubiese sido que lo encontrado en 2014 se está bombeando y allí estaríamos más cerca de un yacimiento, o sea de algo que se puede extraer”, destacó Gaucher.
En tal sentido, manejó opciones técnicas de extracción del hallazgo: “Si el petróleo puede fluir libremente de la roca, se puede extraer tal como se hace con el agua desde un pozo. Este hidrocarburo no se encuentra bajo presión; de lo contrario ya hubiésemos visto el chorro tal como ocurre en las películas”.
Otra posibilidad “es que la roca tenga atrapado al petróleo y no le permita un movimiento porque los poros son pequeños o de baja permeabilidad. En este caso, el único método es no convencional de fractura hidráulica o fracking. Si se quisiera tratar con este método, habría que perforar un pozo y con agua mezclada con productos químicos, algunos de ellos muy peligrosos inclusive cancerígenos, ácidos y arena bombeados a alta presión, fracturan la roca de manera milimétrica, pero lo suficientemente grandes como para permitir que fluya el hidrocarburo”, explicó.
SOBRE EL ACUÍFERO
Gaucher aclaró que “el fracking genera problemas ambientales y habría que asegurar que ese fluido nunca llegue al acuífero Guaraní que está apenas encima del yacimiento. Si se leen las leyes correspondientes para esta técnica en Alemania –donde hay una moratoria y no se puede usar salvo en casos muy especiales– de esta forma estaría prohibido porque hay muy poca distancia estratigráfica. Es decir que los estratos que hay entre la parte a explotar y la parte donde está el acuífero Guaraní, tienen muy poco espesor. Es altamente probable que si se utiliza el fracking, se contamine el acuífero”.
La empresa Petrel publicó en su sitio web un esquema geológico basado en los pozos anteriores y muestra que allí hay una falla local que va desde las formaciones donde se hallaría el petróleo hasta el Acuífero Guaraní. “Esa falla es como un conector hidráulico, es decir, hay una conexión entre el lugar de la extracción y el acuífero que se contaminaría si se aplicara la técnica”, añadió.
Según lo publicado por la empresa, nunca se habla de fracking, sino que refiere a yacimientos convencionales. “En todo caso requiere un estudio de impacto ambiental de máximo nivel y que desde mi punto de vista, no sería posible su aplicación. Con la Sociedad Uruguaya de Geología fuimos el año pasado a una comisión de diputados que estudia el fracking y recomendamos una moratoria por algunos años para permitir el estudio de la técnica aplicada en nuestro país”, informó.
PERFORADA CIENTOS DE VECES
La antigüedad de la roca no es relevante, según el geólogo, “porque estos estratos corresponden al período carbonífero y térmico”. La ocurrencia en Cerro Padilla “se encuentra dentro de lo que conocemos como la Cuenca Norte, que parte de la Gran Cuenca del Paraná, de más de un millón de kilómetros cuadrados, y abarca buena parte del sur y sureste de Brasil, Paraguay, Argentina y Norte de Uruguay. En esa cuenca –que ha sido perforada cientos de veces, sobre todo del lado brasileño y argentino– no apareció nunca un solo pozo de petróleo. Existe uno solo del que se extrae gas y es relativamente pequeño, en Barra Bonita, Estado de Paraná”, especificó. Según Gaucher, “ese pozo se encuentra en el punto más profundo de la cuenca, donde se esperan las temperaturas pertinentes para generar hidrocarburos gaseosos. Pero con los cientos de perforaciones, nunca se sacó petróleo. O sea, es algo para tomar en cuenta”.
MÁS DATOS QUE AHORA
El docente recordó que en la cuenca del Santa Lucía hubo pozos en la década de 1950, “con la ocurrencia de petróleo e incluso hasta con su composición, es decir, con más datos que lo que tenemos ahora. Y para este mismo punto ya hubo publicaciones de un mismo hallazgo, por eso no queda claro lo nuevo de este comunicado que, además, está muy mal redactado porque refiere al hallazgo a profundidades superiores a la del pozo, algo que, obviamente, es imposible”, concluyó.