¿Tirarlo abajo y hacer uno nuevo o reformarlo? El público se pregunta y debate sobre el futuro del Estadio Centenario –pensando, sobre todo, en la posibilidad de coorganizar el Mundial de 2030– luego de las palabras del secretario de Deportes, Fernando Cáceres, que se refirió a que manejan las dos opciones. Levantar un escenario de cero conservando los espacios simbólicos o retocar el actual. “El Centenario merece una revisión profunda y al no tener la sede, de todas maneras, se nos vienen los 100 años, donde habrá eventos de importancia que se tendrán que desarrollar en el Estadio Centenario. Por lo tanto la revisión del estadio en profundidad es una materia pendiente y una obligación en cualquier caso, haya sede o no haya sede”, mencionó el jerarca en radio Carve.
“Lo primero es compartir esa sensación que genera el solo hecho de pensar una reformulación, ya no la demolición, una reformulación a fondo de lo que es la estructura hoy del Estadio Centenario, también a mí me conmueve y me interpela. Así que no es un tema que nos sea indiferente a ninguno de los uruguayos”, continuó Cáceres.
También dijo que el “valor” de este Monumento al Fútbol Mundial, como lo denominó la FIFA, es “intangible” debido a su simbolismo e historia, a la vez que se trata de una “referencia para todos los uruguayos” por su carga emocional “muy fuerte”.
“Así que admito que las hipótesis, cualquiera de las hipótesis, son en cualquier caso movilizadoras y que hay una primera reacción natural y en Uruguay un poco más intensa y es la resistencia a los cambios. No conozco grandes obras que generan resistencias importantes, aunque después terminan siendo motivo de orgullo como la Torre de Antel o el Antel Arena. Tenemos cierto temor al cambio y más con una obra de valor”, aseguró el secretario de Deportes.
Las propuetas
En concreto, se han presentado dos propuestas para el futuro Estadio Centenario, reconoció Cáceres. “Lo que ha habido en estos 10 o 15 años son propuestas presentadas por estudios de arquitectura, empresas inversoras, que han arriesgado no solo del interés de participar de un proyecto de reconversión del estadio sino también proyectos concretos de diseño. Y en eso se aprecian dos tendencias: una que construye el proyecto sobre la base actual del estadio Centenario. Los peritajes señalan que la construcción antigua es la que mejor se ha preservado en el tiempo y hay proyectos que rescatan la estructura actual y sobre ella construyen la nueva idea”, dijo.
Luego pasó a detallar la restante idea: “Y la otra tendencia es la que entienden que hay que hacer una reformulación casi completa y lo que proponen es preservar aquellos espacios de alto valor patrimonial y simbólico y sustituir el resto de la estructura por una construcción nueva aprovechando el poder partir de cero en algunos espacios del estadio para adecuarse a las exigencias”.
En tanto, Eduardo Abulafia, coordinador de Uruguay para la candidatura conjunta con Argentina y Paraguay del Mundial de 2030, explicó a Referí, después de oficializarse que Uruguay tendrá dos sedes si es designada la organización, que estiman que las obras de los dos estadios para 2030 demandarían una inversión de 600 millones de dólares.