ARAPEY. (Por Pablo Blanc). Cuando los productores se lamentan que durante el verano pasado llovió solo 200 milímetros –algunos menos y otros más– y con temperaturas en varias jornadas por encima de los 36 grados, escuchar a Tom Filbin manifestar que en invierno la temperatura llega a 40 grados bajo cero –con varios días de nieve– y en el año el promedio de lluvias es de 170 milímetros, surge una realidad constrastante con la nuestra.
Este productor, que venía con otro amigo que se fracturó en el aeropuerto antes de despegar en su país, señala que ya conoce Uruguay porque fue parte del congreso mundial realizado en 1994 y se muestra a gusto con el país y cómo lo ha recibido. Con un aceptable español, producto de contar con familiares en Perú, este productor tiene su establecimiento en el estado de Nevada, en la zona más seca del desierto de Estados Unidos. Cuenta que lo normal es que al año llueva 170 milímetros aproximadamente y saben que eso no cambiará. Además, el invierno es muy frío y llega a 40 grados bajo cero y con nieve.
Cría un Merino mediano, de micronaje para las borregas entre 18 a 20 micras, que considera lo ideal para producir en su zona. Busca un Merino para los “rancheros” de la región, comercial, teniendo en cuenta que produce 500 carneros al año, vendiendo la mitad en un remate anual y el resto se coloca a nivel particular. Allí el área de trabajo es con gente de a caballo, porque no cuentan con mucho cerco (alambrados, en Uruguay). De todas maneras, aclaró que el campo que posee él y varios productores de la zona es propiedad del Gobierno y rentan esa fracción de campo.
Recordó que, hasta 2005, contaba en su establecimiento “con 21.000 ovinos –entre borregas y ovejas–“, pero vendió todo para “mi descanso”, aunque no pudo hacerlo del todo y se dedica a la cría de reproductores machos.
Sostuvo que, en Estados Unidos, “muchos rancheros han cambiado las borregas por sangres Merino, pero donde la carne ovina también tiene un importante protagonismo, con valores aproximados de 260 dólares por animal, muy superior a lo que se paga en Uruguay por corderos”.
Producen buen Merino con 40 grados bajo cero y solo 170 milímetros de lluvias al año
