El ingeniero agrónomo Marcelo Pereira Machín sobrevoló hace algunas jornadas los campos del departamento y la región, precisamente para conocer desde otro ángulo la situación y abarcar mayor área de apreciación. Piloteada la aeronave por su primo Leandro Pereira, el coordinador de la regional litoral norte del Instituto Plan Agropecuario sostuvo a EL TELEGRAFO que “tuvimos la posibilidad de volar sobre ¾ parte del departamento, saliendo desde Paysandú hasta la Cuchilla del Fuego y las inmediaciones”.
“Se ve que prácticamente en todo el departamento, fundamentalmente en campo natural, hay muy baja disponibilidad de pasto”, dijo el profesional sanducero. “A través de un monitoreo que realizamos, la altura del pasto promedio era del orden de los tres centímetros, pero esta situación se ha homogeneizado en todo el departamento”, acotó.
Para Pereira, “estamos viviendo el mes más complicado del año en cuanto a disponibilidad de pasto, por lo que se aprecia una generalización que arranca en el verano, fundamentalmente de diciembre a marzo, que tuvimos tasas de crecimiento muy por debajo de lo normal”.
Con respecto a la situación de productores que están sufriendo la muerte de ganado, indicó que “desde el aire no se aprecia, pero sí he tenido información de lo que está sucediendo. Incluso se han visto vacas con cetosis (desorden metabólico en vacas de alta producción) en algunos lugares”.
Indicó que en general “el ganado se ha desbarrancado este último mes y la gente que viene con pasto desde hace mucho tiempo –es el caso de los predios sobre dotados y no es solo en Cuchilla del Fuego– también están sintiendo los mismos efectos”. En lo sanitario aclaró que “esta zona es complicada respecto a la garrapata e inmediatamente aparece tristeza, que ha llevado al Plan Agropecuario a realizar charlas y jornadas por todos lados”.
Demanda de raciones
El ingeniero agrónomo Luis Simean complementó sobre la delicada situación de los campos del Este de Paysandú que “se nota en los volúmenes de venta de las raciones de Copagran, generando un incremento importante de la demanda, asociado a la sequía que generó falta de pastura en el verano y el largo invierno que venimos teniendo”.
Lo duro del invierno “ha sido por la cantidad de días sin mayor temperatura, que permitiera la recuperación de las pasturas y la dificultad para mejorar el ganado”, explicó el gerente de la filial Paysandú de la cooperativa. Señaló que “la demanda en esta ocasión de la raciones que distribuimos, llegó a zonas más ganaderas que tradicionalmente no consumen raciones. Se trata de raciones de autoconsumo y con fibra que tuvieron mayor salida”, dijo.
Juan Pablo Fumeaux, del sector raciones de la Cooperativa Agraria Nacional, mencionó que “se pudo cumplir con las expectativas de los diferentes productores, teniendo en cuenta la alta demanda por raciones”. Manifestó que las mayores consultas “fueron para el aporte a las recrías de 120 a 150 kilos en adelante. Para eso contamos con diferentes balanceados que han tenido un aprovechamiento en lo productivo”.
Precisó que la mayor demanda “vino desde el eje de ruta 26 y la zona de Guichón hacia adentro, de unos 40 a 50 kilómetros en adelante, ha sido muy castigado por el clima y con los campos que no han tenido la respuesta esperada por los productores”.
