Trasciende nuevo caso de abigeato al aparecer 10 ovejas muertas en campo de exfutbolista

“Hay que aprender a vivir con ella, y mejorarla dentro de lo posible”. Así sintetizó Rodolfo Rodríguez su impotencia, al manifestar a EL TELEGRAFO lo acontecido en su establecimiento de la zona de Villa del Carmen, departamento de Durazno, en donde este lunes aparecieron 10 ovejas muertas, y determinando que en lo que va del año la cifra sea de 300 animales menos.
“No soy el único al que le está pasando, porque hay mucha gente que le pasa y no tiene posibilidades de llegarle a los medios, o que no lo hace por algún motivo”, dijo el exgolero de Nacional –Campeón de América y de la Intercontinental en 1980–, la selección uruguaya y el Santos de Brasil.
Aseguró que en lo personal, “no tiene sentido seguir aguantando o hablando con gente que busca solucionar, porque al contrario, la tendencia ha sido de empeorar la situación y hay que ponerle límites al abigeato”. Incluso, mencionó que “llega un momento en que es difícil seguir trabajando y motivarse. Un lunes cuando te programás la semana para trabajar e intentar hacer algo para mejorar tu producción, y te encontrás 10 animales carneados es difícil, incluso para motivar a la gente que trabaja con uno”, dijo.
Reconoció que alguna vez que le faltó uno o dos animales no hizo denuncia, pero puntualizó que “acá hay una organización, porque mataron 10 ovejas, que son más de 200 kilos de carne”. Incluso mencionó que para el pueblo cercano no cree que vaya. “Esto es más para Durazno o alguna otra ciudad de otro departamento”, consideró.
Rodríguez manifestó que en la reunión recientemente realizada entre el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech, con las gremiales del agro, se dijo que “son 25.000 las denuncias de abigeato en ovinos en el año, más las que no se hacen, porque la gente a veces no puede, o se calienta y no va. Con esa cantidad de denuncias, uno se puede hacer una idea de como es el negocio”, aclaró el exfutbolista.
“Hace más años que estoy en el sector agropecuario de los 22 que jugué al fútbol”, sostiene quien se dedica a la cría de vacunos y ovinos de la raza Ideal. “Me encanta el campo y los animales, y me deprime lo que vi ayer de mañana, viendo el tendal de ovejas muertas, carneadas y con las vísceras”.
El destacado deportista manifiesta que “no debemos entregarnos al pichaje. Vivimos entre rejas, criamos ovejas para que no las roben, o no hacer tu vida normal para que no te asalten, y eso te demuestra que está todo mal. No me voy a entregar. Como no me entregué en varios lunes de mi vida y que pensaba cómo arranco la semana, por esos domingos terribles que se puede tener, en que cometés un error y perdés un partido o marrás un penal. Pero el lunes levantás la cabeza y seguís”, dijo.
“Algunos amigos me decían ‘no te vayas a exponer’”, dice, tras conocerse lo acontecido el lunes. “Viví expuesto 22 años, ¿por qué me voy a callar ahora?, se pregunta. “Pienso que estoy hablando en representación de los muchos productores que no tienen la posibilidad de expresarse y decir las cosas que estoy diciendo ahora”.
Respecto a la posibilidad de utilizar animales de guarda, como puede ser llamas, mulas californianas o perros Maremma, dijo que le han propuesto, “pero tampoco quiero que me maten a alguno de esos animales, que incluso son difíciles de conseguir”.

“Da mucha lástima”

“Conociéndolo a Rodolfo, debe estar con mucha impotencia y muy amargado”, dijo por su parte Carlos Amaro Nadal, el presidente de la Sociedad de Criadores de la raza Merilin, y también exjugador de Nacional, Deportivo Cali de Colombia y el Sevilla de España, y compañero del exguardameta de la selección uruguaya de fútbol.
Entiende que “las cosas se están yendo de cauce, porque sea tan repetitivo y algo casi natural, indigna bastante”. Y agregó que “da lástima, porque el rubro bien hecho, sin robos y perros que ataquen las majadas, es muy rentable”.
Se refirió a la raza Merilin, dejando en claro que “la carne mantiene buenos valores y la lana fina se ha comercializado en precios muy atractivos”. Estableció que “se han registrado valores de 7 a 8 dólares por Merilin, que cierran un negocio muy positivo”.
“Pero tenemos ese tipo de frenos que te hace pensar y ver muy bien en donde tiene el predio. Eso limita la cantidad de ovinos que puede haber en el país”, manifestó Nadal.
Sobre el abigeato enfatizó que “falta voluntad política, porque no puede ser tan complejo, y hay gente que no está haciendo los deberes como debe hacerlos”. Se habla de que “debemos producir más para que el país salga adelante y con mayores ingresos, pero no podemos mantener el rubro y ahí está el problema”.
Acotó que “las autoridades que están a cargo de esto no están cumpliendo con el cometido. Se le está escapando la liebre porque miran para el otro lado”. Se refirió a la gente que “es agarrada infraganti y al otro día se arrepiente o que lo va a pagar en cuotas. Lo largan y al otro día vuelve a hacer lo mismo”.

Modifican leyes

Este lunes, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech, manifestó a las gremiales del agro que para combatir el abigeato, otro punto abordado en la reunión, el Gobierno modificó leyes para endurecer las penas en el Código Rural y pasó las penas al área urbana.
El secretario de Estado recordó el trabajo coordinado con el Ministerio del Interior, que más de una vez concurrió al Congreso de Intendentes para dialogar sobre el aumento del control bromatológico, responsabilidad de cada comuna, excepto en Montevideo, por ser jurisdicción del Instituto Nacional de Carnes.
“Es como cuando se roba la radio del auto y después la gente va a comprar radios robadas. Así, el negocio es difícil de parar”, advirtió el ministro.