Huracán y Progreso igualaron ayer 0-0 en el Estadio Artigas, en un empate mentiroso que dejó a los dos sin posibilidades de alcanzar el título del Torneo Clausura.
Ambos jugaron para mucho más, pero suele suceder que la impericia en el remate final, o la capacidad de los arqueros determinan que los partidos terminen con resultado cerrado como en este caso.
Mientras allá en Porvenir el más que meritorio 18 de Julio hacía lo suyo y esperaba con el oído en los transistores, Huracán y Progreso quemaban los últimos cartuchos. Y allí en el cierre Giles tapó dos pelotas que aterrizaron peligrosas en su área chica, mientras que del otro lado un disparo de Vidiella se fue apenas afuera y otro lo contuvo en muy buena forma el arquero Izaguirre. Así se fueron las esperanzas de ambos. Huracán que jugaba por todo y Progreso por el Clausura.
Arrancó mejor Progreso, más firme en el medio campo, subiendo por la izquierda, poniendo pelotas en el área, con Rossi muy activo que metió un disparo que entre el arquero y el horizontal se terminó desviando. En esos primeros minutos le costó a Huracán hacerse de la pelota, pero aún así Brandon Logiurato de buen primer tiempo, obligó a un gran esfuerzo al arquero.
De a poco fue mejorando el globito en medio de un partido donde los dos trataban de jugar buen fútbol. Buscaban salir y avanzar con pelota controlada. Y se hizo un partido de ida y vuelta, atractivo. Un tiro de Sueldo rebotó en un defensa y se marchó al córner.
Comienzo del complemento y otra vez arranca mejor Progreso. Llega en un par de oportunidades, con Huracán jugado a la contra, pero también obliga e Izaguirre salva dos veces.
Los minutos finales con Progreso buscando el gol que le diera el título. Giles y la línea final responden bien. Y se va los minutos, los dos quieren pero no pueden y termina en un justo empate, aunque sin goles. Sí, los dos se quedaron con las manos vacías. El festejo está en Porvenir. “Chapatín”