Desde la Dirección Departamental de Salud (DDS), se mantiene el alerta dirigida a la población, sobre todo a los grupos más susceptibles, como los niños, ancianos y enfermos crónicos, para que no se expongan al sol en horas pico y mantengan una permanente hidratación.
La referente epidemiológica de la Dirección Departamental, licenciada en Enfermería Nataly Rodríguez, indicó a EL TELEGAFO que la ola de calor evidentemente sigue manifestándose sobre la región, con temperaturas extremas y condiciones meteorológicas que acentúan la sensación térmica y el agobio.
Explicó que “tuvimos dos casos puntuales en este último período con diagnósticos de golpes de calor, y con criterios clínicos de gravedad que requirieron internación en servicios de terapia intensiva. De todas formas nosotros, ante las temperaturas que se vienen registrando, estamos formulando recomendaciones fuertemente en lo que son medidas de prevención con diferentes recomendaciones que emitió el Ministerio de Salud Pública (MSP). Tenemos asimismo algunas poblaciones de mayor riesgo, como los niños, sobre todo menores de seis años, y personas ancianas, así como quienes padecen alguna enfermedad crónica”.
Acotó que “estamos enfocando también la prevención hacia personas que practican algún tipo de ejercicio físico y que muchas veces tienen una intensidad tal que requieren de esfuerzo, porque estos fueron precisamente de los casos que hemos tenido con complicaciones vinculadas a la exposición a la alta temperatura en una intensidad y horario tal que tuvieron repercusión negativa para su salud”.
Recordó que las medidas de prevención apuntan a una buena hidratación, “orientándonos en esta época del año al aumento del consumo de líquidos, preferentemente agua y no líquidos azucarados. Sobre todo tener especial precaución con estas poblaciones de riesgo que mencionábamos”.
A los niños y adultos mayores “debe ofrecérseles con mayor frecuencia líquidos para su hidratación, optar por una alimentación fresca en base a frutas y verduras, en lugar de comidas muy abundantes y calientes, e incorporar todas las medidas de protección de la piel para la exposición al sol, con protector solar, sombreros de ala ancha, lentes para protección del sol, vestimenta tratando de cubrir la mayor parte del cuerpo, y con colores adecuados para la época”.
Consideró asimismo que “paralelamente hay que estar atentos a las diferentes señales que puede estar dando el cuerpo, tanto de signos de deshidratación como alguna otra sintomatología que pueda estar vinculada a un episodio de golpe de calor”.
Síntomas
El llamado “golpe de calor” es una situación provocada por un anormal calentamiento del cuerpo en un período de tiempo relativamente breve. Los síntomas pueden ser calambres, agotamiento, dolor de cabeza, náuseas y/o vómitos, deshidratación caracterizada por piel y boca seca, decaimiento, ojos hundidos y sed intensa, además de presión arterial baja y pulso rápido.
El cuadro más grave se da cuando la temperatura del cuerpo sube por encima de los 40 grados centígrados, lo que puede provocar alteraciones cardíacas o encefálicas graves, inestabilidad al caminar, mareos, somnolencia, confusión, delirio o convulsiones, aseguran los especialistas.
