En jornada gris votó el 30% de sanduceros habilitados

Un cielo gris plomo acompañó el comienzo de la jornada electoral de la víspera, las internas o primarias, de voto voluntario, que en Paysandú –aún es un estimativo– recogió el sufragio del 30% de los electores habilitados.
La jefa de la Corte Electoral, Laura Cruz, confirmó que “hubo unas cuantas ausencias de convocados a integrar las mesas receptoras de votos, por lo que en algunos casos debimos utilizar los suplentes y en otros directamente los convocados como retén, que llegan directamente a la sede de la Junta Electoral y son utilizados en última instancia”.
De hecho, “en dos circuitos urbanos se constató que no se hicieron presentes ninguno de los seis convocados –ni los titulares ni los suplentes– por lo que se utilizaron los de retén y así se pudieron constituir las mesas y funcionar con normalidad”.
Uno de los aspectos que sufrió críticas de varios de los cabezas de lista fue que no había suficiente espacio para que se pudieran colocar todas las listas de manera ordenada. Laura Cruz aseguró que “los lugares de votación son en general los mismos, pero también es cierto que se agregaron algunos como el polideportivo de UTU. Por otra parte, hay que tener en cuenta que en las internas cada vez se presentan más hojas de votación, que en este caso ascendieron a 159. Se necesita mucho espacio. De todas maneras, cuando tuvimos la información que había listas en el suelo –lo que no corresponde– se enviaron mamparas, algunas con bolsillero para las hojas de votación, de modo que poco a poco se fueron solucionando cada uno de los inconvenientes”.
La introducción del uso de tablets “provocó cierto tiempo de demora, en la medida que los integrantes de mesa tuvieron que acostumbrarse a su uso. En las tablets se ingresaban los votantes digitalizando la credencial cívica porque estaba grabado el padrón. Se marcaba al votante y el número de sobre utilizado. Posteriormente, se usó como herramienta para transcribir el resultado tras el conteo de las hojas en los circuitos”, indicó Cruz.
Al recorrer la ciudad, se apreció una escasa asistencia de votantes, quienes en apenas minutos podían cumplir con el trámite. En muy pocos lugares –y durante un período corto de tiempo– se establecieron filas de ciudadanos.
Hacia el mediodía el celeste del cielo pudo apreciarse, pero de tanto en tanto el gris de nubes bajas volvía dominar el firmamento. En tanto los delegados cumplían su tarea de reposición de listas en los circuitos donde era necesario.
Al cierre del horario de votación, los integrantes de mesa procedieron al escrutinio primario y posterior traslado de la valija conteniendo la urna y demás implementos hacia la Junta Electoral, donde quedaron en custodia, a cargo del Ejército.
A las 20.25 arribó la primera urna a la Junta Electoral, un circuito ficto ubicado en la Exposición Rural Feria para votos observados rurales. Al ser observados no se llevó a cabo el escrutinio, por lo que solamente se procedió al traslado.
El primer circuito con escrutinio primario en arribar a la Junta Electoral –como en los últimos actos eleccionarios– fue el instalado en la escuela 47 de Colonia 19 de Abril, serie KCE Rural, donde votaron 49 personas. A las 21.24 llegó el vehículo, un auto matrícula IAD 5046. Cuatro minutos más tarde, arribó la segunda urna, ubicada en la escuela 66 de Rabón, serie KDC rural.
Si bien en anteriores elecciones –incluso nacionales– el arribo de la primera urna con escrutinio primario era en el entorno de las 20.50, se estima que la cantidad de hojas de votación y el uso de una nueva tecnología (la tablet) enlenteció el proceso. La ciudadanía volverá a ser convocada el domingo 4 de agosto para una consulta popular con voto voluntario que permita habilitar un referéndum para derogar la Ley Integral para Personas Trans. Laura Cruz aseguró que “la operativa será la misma, si bien la cantidad de circuitos se reducirá aproximadamente a la mitad”.