Tras reunirse en asamblea, los padres de los alumnos de la Escuela Nº 12 Rural ubicada en el kilómetro 10,500 de Ruta 90 decidieron ayer no enviar a sus hijos a clases hasta que se obtengan respuestas de las autoridades correspondientes respecto a un supuesto caso de meningitis en el centro escolar y los reclamos de que arreglen las instalaciones de agua potable al centro docente, entre otros planteos que los padres aseguran están realizando desde hace mucho tiempo.
De acuerdo a lo informado a EL TELEGRAFO por integrantes de la Comisión de Fomento del centro escolar “desde hace ya mucho tiempo la Dirección de la escuela hizo todos los pasos protocolares requeridos para tener los baños, el agua potable, una campana para poder extraer el gas del horno que tenemos en el lugar, a lo que se agrega ahora un posible caso de meningitis de un alumno de 7 años. Se le hicieron los análisis al niño, que ha quedado internado en su hogar, y han aparecido asimismo casos de otros dos niños con dolor de cabeza y vómitos, sin que se nos haya informado sobre los resultados ni se adopten medidas”.
Respecto a la situación en la escuela, indicaron que “queremos que se nos dote de una auxiliar. Estamos a diez kilómetros de la ciudad. La cañería de agua potable está tapada por los hormigueros y el agua llega sucia y contaminada ya prácticamente desde la bomba, y el caso de meningitis a su vez ha sido el disparador final de esta serie de reclamos. Se le avisó a la inspección de guardia de zona, para saber qué pasos seguir, pero no tuvimos ninguna respuesta”.
Indicaron que al niño se le hicieron los exámenes y no se informó cabalmente sobre los resultados, “lo medicaron como para la meningitis y sabemos que el niño mejoró. Sabemos que después de una semana le dieron el alta, pero quedó en la casa y la madre tuvo que seguir todo un protocolo de limpieza para este tipo de casos, con desinfección del baño, y el niño sigue en su casa”.
“Ahora tenemos dos casos más con dolor de cabeza y vómitos en la misma escuela, que no sabemos en qué van a derivar”, subrayaron, a la vez de lamentar que “no hemos tenido respuesta de nada, porque no se han comunicado con nosotros”.
Ante estos hechos, los padres de alumnos se reunieron este lunes “y en asamblea se decidió no enviar los niños a la escuela hasta que se nos dé una solución, por el agua potable, por los baños (que son compartidos por mayores y niños), por la campana y por este caso supuesto de meningitis. Este martes haremos una carta a la inspección para avisar que ningún niño está concurriendo a la escuela por este caso y las otras carencias sobre las que venimos reclamando”.
Acerca del agua, destacaron que la que se está usando se saca de una canilla del tanque que está detrás de la escuela, desde donde se acarrea hacia los baños, y además los padres se hacen cargo de la compra de bidones de agua.
EL TELEGRAFO procuró una comunicación telefónica con la Dirección Departamental de Salud para consultar sobre el eventual caso de meningitis, pero hasta anoche no habíamos podido lograr respuesta a nuestros requerimientos.