Presentaron en Facultad de Agronomía de Salto los trabajos realizados en ovinos

Como sucede tradicionalmente el segundo viernes del mes de agosto, la Unidad de Ovinos de la Estación Experimental de la Facultad de Agronomía en Salto (Eefas) realizó su jornada anual, presentándose varios de los trabajos realizados por los estudiantes y los técnicos de la institución.
La doctora Elize van Lier, principal de la cátedra de ovinos, manifestó a diario Cambio que las tareas que se desarrollan en el local de la facultad en San Antonio, se desarrollan “muy bien” y explicó que los estudiantes tienen “el mismo trabajo con toda la producción ovina”. Recordó que “tuvimos un año de toxoplasmosis que redujo bastante el potencial reproductivo a través de los abortos y siempre hay un pero por lo cual no llegamos a maximizar la producción”.
Destacó que este tipo de situaciones, que se pueden registrar en todos los predios ovejeros, más que una problemática para la enseñanza, es una gran oportunidad “porque cada problema que tenemos para resolver es una forma de estar enseñando a los futuros agrónomos cómo enfrentar la situación y además tener ejemplos de la realidad”.
Respecto a las principales problemáticas que tiene el rubro en la actualidad, dijo que “por suerte, y mantengo los dedos cruzados, la mano negra y los perros no han entrado hace un buen rato y esperemos que siga así, porque nos han flagelado en tiempos anteriores”.

MAJADA MERINO
La majada de la Unidad de Ovinos de la Eefas se refundó “hace 12 años” y en dicho momento “tomamos la decisión de ir por la lana, que en Facultad de Agronomía había desaparecido el merino de las diferentes estaciones experimentales” explicó Van Lier. Agregó que el auge de la lana fina facilitó la toma de dicha decisión porque “como institución de investigación y enseñanza tenemos que tener esa raza en nuestros campos experimentales”.
Uno de los grandes temas que se desarrollan en dicha unidad de estudios e investigación, es la selección genética por resistencia a parásitos gastrointestinales. “Tenemos el núcleo de selección por resistencia, que es bien importante en el sentido que tenemos animales con resistencia en el percentil 1 de la población general de Merino”.
Los profesionales que integran dicha unidad aspiran “a que estos animales sean atractivos para los propios productores” con el objetivo de comenzar “en algún momento” a difundir dicha genética a la población general, explicó Van Lier.

REPRODUCCIÓN
En cuanto a la prolificidad de la raza Merino Australiano, Elize van Lier, dijo que “no debería ser un problema”. En el caso de la majada de la estación experimental se trabaja con “un sistema de IATF, obviamente que se hace una sincronización que incorpora hormonas y aumentan la tasa ovulatoria”.
“Todos los años en la IATF hemos tenido prolificidades de 1,3 y 1,4 y este año superamos el 1,6 así que ese no es el problema, uno puede lograr mellizos con el merino” explicó la profesional, aunque advirtió que lo más importante es “poder atender esa oveja mellicera”, de lo contrario, entiende que “si no podemos atender esa oveja, si no tenemos alimento para darle, no iría por aumento de la prolificidad”.
Desde su punto de vista, los resultados reproductivos parten desde “un animal que tiene que ser bien criador”. La doctora Van Lier dijo que “lo fundamental es criarlo bien desde cordero hasta la recría y después tenés buenos animales para trabajar”.
Tras la exposición realizada por Facultad de Agronomía, se desarrolló una charla del ingeniero agrónomo Rafael Tardáguila analizando los mercados.