Bancada nacionalista denuncia “emergencia sanitaria” en San Félix

“Una situación de emergencia sanitaria” en San Félix fue denunciada por la bancada de ediles del Partido Nacional mediante una carta enviada al intendente Guillermo Caraballo y derivada posteriormente al Departamento de Servicios, con la firma de –entre titulares y suplentes– quince integrantes de esa bancada.
En la zona vive la edila Guadalupe Caballero, quien fue la informante ante sus pares de la situación descripta luego en la “minuta de urgente consideración” como muy problemática debido a la falta del servicio gratuito de barométrica, provisto por la Intendencia de Paysandú.
“Es impresionante el olor nauseabundo que se da en todo el barrio”, indica el documento. “Los pozos están desbordados, lo que hace que el agua servida comience a circular por las veredas”, agrega.
“El 18 de octubre fue enviado el listado de vecinos que necesitaban la barométrica. El tiempo ha pasado; un mes y medio y todo sigue igual. Mientras tanto el agua se acumula en la vía pública”, destaca más adelante.
“Existe un gran riesgo en cuanto a la salud de los vecinos siendo muchos de ellos niños y adultos mayores. Hace 2 meses que esos pozos no son limpiados”, por lo que “urge que la Intendencia tome cartas en el asunto y proceda a cumplir con un servicio tan esencial como lo es el vaciado de los pozos con agua servida”.
De lo contrario “será imposible evitar alguna epidemia por falta de higiene” concluye la minuta.
“NO TENEMOS DENUNCIAS DE LOS VECINOS”
El director general de Servicios, Federico Álvarez Petraglia, en tanto, aseguró a EL TELEGRAFO que “no tenemos denuncias de vecinos, solamente una denuncia de ediles, pero que no quepa duda que este jueves personal de nuestro Departamento concurrirá al lugar para identificar personalmente los problemas que se anuncian con sentido apocalíptico y se tomarán más medidas adecuadas”.
“Hay que tener en cuenta –agregó– que el servicio gratuito de barométrica se ve superado en su capacidad de respuesta por los pedidos que surgen de vecinos de toda la ciudad, con las mismas necesidades. Es evidente que cada caso se aprecia como urgente, porque el desborde de un pozo negro es un asunto complejo”.
“Ante esta realidad trabajamos a la máxima capacidad de nuestros equipos. Otro elemento que debe considerarse es que las fuertes lluvias pueden provocar el llenado y desborde de manera muy rápida y además periódica. Todas estas cosas afectan el normal desarrollo del servicio, afectando el tiempo de respuesta”, dijo también.
“Pero concurriremos a San Félix para hablar directamente con los vecinos que estuvieran afectados y coordinar lo que desde la Intendencia se pueda hacer para subsanar a la mayor brevedad este asunto”, resumió Álvarez Petraglia.