“Estamos convencidos que el trabajo que se va a realizar nos va a arrimar arriba. Todos en el cuerpo técnico tenemos esa misma línea”, dijo el entrenador Álvaro Ilaharregui tras dirigir su primer entrenamiento con la selección Sub 17 de Paysandú, que comenzó a pensar en su participación en la Copa Nacional de Selecciones de la categoría.
El primer movimiento fue futbolístico, ante la Sub 15, con el objetivo de ver y evaluar rendimientos. “Vimos jugadores interesantes, de buen pie y dinámica, aunque notamos un desequilibrio grande en cuanto a lo físico, porque algunos están en actividad y otros tienen poco ritmo”, remarcó el entrenador, que anunció que la próxima semana se volverá a trabajar en esta modalidad.
Para ese segundo entrenamiento se repetirán algunos nombres y habrá otros nuevos, con el objetivo de “tras esa nueva práctica de fútbol definir el plantel con el que vamos a trabajar desde el 2 de diciembre”, adelantando que “será prácticamente el definitivo, más allá de que siempre puede haber alguna variante”.
Ilaharregui piensa en contar con 22 o 23 jugadores en ese plantel, pero también sumará “a dos o tres jugadores Sub 15, para que puedan seguir el proceso, y lógicamente contar con ellos si están en condiciones y se ganan el lugar”.
Lo importante, valoró, es que “hay ganas y compromiso, por lo que comenzamos bien”.
Ahora se intenta conseguir “las Termas de Guaviyú o algún lugar para poder hacer un campamento de dos o tres días, lo que nos permitiría hacer doble y triple horario, pero también conocer al plantel”.
Los objetivos de la Sub 17 están claros. Primero, la formación. Siempre esperando que el trabajo pueda dar sus frutos y se pueda llegar arriba.
“Lo primordial es la formación, sabemos que ese es nuestro principal objetivo. Y hay que ser realistas: en esta generación había cinco titulares del año pasado que se fueron a Montevideo”, afirmó.
