Día: 5 de diciembre de 2019

El jinete sanducero Pablo Durán, único representante uruguayo, logró la quinta ubicación entre los más destacados participantes de Argentina, Brasil y Chile, en la Copa de Campeones realizada en Mendoza, y organizada por la Sociedad de Criadores de Caballos Criollos de Argentina.
El experimentado jinete concurrió al evento junto al expresidente de la Sociedad de Criadores de Caballos Criollos de Uruguay (SCCCU), Carlos E. Parietti, en donde cumplió con creces las diversas pruebas que componen la competencia.
La prueba Felipe Z. Ballester se realiza desde hace 30 años, y con varias categorías. Para la categoría internacional se designaron a los mejores cuatro jinetes de Argentina, dos chilenos que ya habían sido campeones de esta competencia, dos brasileños, que ya habían sido también campeones, y Durán por Uruguay.
El sanducero aclaró a EL TELEGRAFO que “es una prueba que no se hace en Uruguay y es parecida a la Gallinal”. Y precisó que “acá se hace con una mano y da muchas ventajas, mientras en Argentina se realiza con dos manos”. El handicap que dio el jinete sanducero es notorio, teniendo en cuenta que los argentinos compitieron con sus caballos, “en tanto el resto estábamos en desventaja porque cabañas de la zona nos prestaron sus caballos”, pero de todas maneras reconoció que “fue una experiencia lindísima”.
Los tres primeros puestos de la Copa de Campeones fueron para los argentinos, cuarto un jinete de Chile y quinto Pablo Durán. Luego siguieron los dos brasileños y el otro chileno.
Sobre la prueba, mencionó que la misma se divide en siete partes: rayada, pare, volapié, y giro, todo sin vacunos.
Sobre la desventaja de los animales utilizados, indicó que ya se piensa rever la situación para el futuro. “Tratarán de que los argentinos no compitan con sus propios caballos. Además, yo montaba una yegua B, que competía también en esa categoría y llegaba cansada para las pruebas”.
Y precisó que “lo lindo es que te inviten por el prestigio que significa, y la posibilidad de participar”. En Argentina la prueba es muy profesional y son alrededor de 1.000 jinetes los que actualmente participan en los distintos eventos. “Incluso hay gente que se dedica a eso, enseña y cobra por participar”, por lo que “el profesionalismo es muy grande”, dijo Pablo Durán.
Un gran cierre del año para “El Ceibo”, el centro de entrenamiento que se ubica en Porvenir, departamento de Paysandú. Días atrás, Soledad Ferreira y Sofía de Arteaga fueron campeonas en el torneo internacional de Paleteadas femeninas en Brasil, compitiendo con las mejores yuntas del país norteño. Ahora, este fin de semana fue la oportunidad para Pablo Durán en Argentina, dejando en alto el prestigio de los jinetes de nuestro país.

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La Federación Uruguaya de Grupos CREA (FuCREA), presentó los resultados económicos de la sectorial agrícola ganadera, donde se vio una mejora de los ingresos, pero “a fuerza de rendimientos récords”, en tanto la lechería ingresó al sexto año consecutivo con “resultados mediocres”.
En el caso de las empresas agrícolas ganaderas volvieron a tener un ingreso económico favorable, tras lo que fue un ejercicio calificado como “espantoso”. Se señaló que esto no hubiera sido posible con rendimientos promedios interesantes como se obtuvieron.
El presidente Germán Fernández, marcó como los grandes desafíos: “producir demostrando que no contaminamos” y si se demuestra lo contrario, “tendremos que cambiar la forma de producir”. Exhortó a los productores a “buscar la excelencia”, a no conformarse “con lo que tenemos o con lo posible. Con ser buenos no alcanza. Queremos que los grupos busquen la excelencia. En CREA lo principal es escuchar al otro, dar una opinión sabiendo que no es la única”, destacó.
Por su parte, el coordinador general de FuCREA, ingeniero agrónomo Martín Aguirrezabala, mostró los resultados productivos y las actividades anuales, en un 2019 donde los costos se mantuvieron altos y los resultados ganaderos estuvieron influenciados por fuertes mejoras en los precios.
A su vez, los resultados de las empresas agrícolas marcan un récord de rendimiento que influye sobre todos los sectores y en lechería, los resultados siguen siendo magros, aunque destacan sobre los predios que no pertenecen al movimiento CREA.
GANADERÍA
En el sector ganadero, el ingreso de capital fue de U$S 117 por hectárea (promedio), tras el análisis de 199 carpetas que incluyeron sistema de cría, ciclo completo e invernada. Los sistemas de invernada fueron los que obtuvieron el mayor aumento en el ingreso de capital, pues pasaron de U$S 82 a U$S 142 por hectárea. El subsector de la cría pasó de tener un capital de U$S 57 en el ejercicio 2017/18 a U$S 84 por hectárea en el ejercicio 2018/19.
Las empresas CREA siguen mostrando que más mejoramientos generan más carne, más producto bruto y mayores ingresos. Entre el ejercicio 2017/18 y 2018/19, hubo un aumento de U$S 655 en el ingreso de capital (U$S 46 por hectárea), el Producto Bruto Total aumentó 23% (U$S 50 por hectárea).
El Producto Bruto Ganadero subió 18% (U$S 33 por hectárea). La producción de carne aumentó 5% (7 kilos por hectárea). Los costos subieron 3% y el Producto Bruto Cultivos aumentó 63% (U$S 12 por hectárea).
AGRÍCOLA GANADERAS
Del magro ejercicio anterior volvieron a crecer. Se analizaron 67 empresas y se vio un ingreso de capital promedio de U$S 296 por hectárea.
Los campos agrícolas llegaron a un Producto Bruto de entre U$S 1.200 y U$S 1.500, mientras que los ganaderos promediaron U$S 400 por hectárea. Las empresas agrícola ganaderas tuvieron un Producto Bruto de U$S 452 por hectárea, con insumos que totalizaron U$S 294 por hectárea y un ingreso de capital de U$S 158 por hectárea. A su vez, las agrícola ganaderas contaron con un Producto Bruto que totalizó U$S 790 por hectárea y los insumos fueron U$S 530 por hectárea. El ingreso de capital fue U$S 260 por hectárea.
LECHERÍA
El sector entró en un sexto año con resultados “mediocres”. El ingreso de capital promedio fue U$S 261 por hectárea frente a los U$S 263 por hectárea de un año atrás. El análisis se basó sobre 100 carpetas.
El precio de la leche promedio alcanzó U$S 0,30, pero los costos rondaron los U$S 0,25 por litro.
Al ingreso de capital de U$S 261 por hectárea todavía hay que restarle la renta de U$S 92 por hectárea por superficie útil (por hectárea arrendada esta cifra asciende a U$S 190 por hectárea), intereses de deuda superior a U$S 50 por hectárea y los costos de vida del productor lechero. Al analizar los resultados, el coordinador del área lechera de FuCREA, Mario Fossatti, sostuvo que “las rentas se llevan el 34% del ingreso de capital de las empresas, que es un porcentaje muy alto de las ganancias”.
La variabilidad de los resultados es muy alta. En el caso de las mejores empresas lograron ingresos por encima de U$S 700 por hectárea y en el otro extremo, las más negativas mostraron pérdidas de U$S 200 por hectárea. Todo eso provoca una gran diferencia entre los dos extremos. Esa diferencia es de U$S 900 por hectárea. Si se analizan los productores ubicados en el 25% inferior y los del 25% superior, la brecha ronda U$S 400 por hectárea.
En caso de las empresas con resultados malos, se observó que son las que tienen insumos más altos sin que hayan podido lograr altas productividades.
“Estas empresas obtienen peores resultados que aquellos productores que gastan poco y producen poco”, explicó Fossatti y consideró que en estos casos, la prioridad debería ser: “bajar costos sin disminuir los ingresos. La mayoría tiene un margen de incremento de productividad importante”. Mirando hacia adelante, Fossatti consideró que habrá “un descenso en el ingreso de capital”.

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