Nacional ganó la final clásica y el Clausura

Nacional festejó mesuradamente el Clausura, pensando en el domingo.
Cardozo fue clave en el arco carbonero para mantener el cero en el primer tiempo.

PEÑAROL 0 NACIONAL 2

Escenario: Estadio Centenario. Árbitros: Andrés Matonte, Richard Trinidad y Horacio Ferreiro. VAR: Daniel Fedorczuk, Andrés Cunha y Nicolás Tarán.
Peñarol: Thiago Cardozo, Giovanni González, Fabricio Formiliano, Enzo Martínez, Gabriel Rojas; Jesús Trindade, Matías De Los Santos, Facundo Pellistri, Agustín Canobbio (65’ Sebastián Fernández), Luis Acevedo (74’ Marcel Novick) y Lucas Viatri (39’ Xisco Jiménez). DT: Diego López.
Nacional: Luis Mejía, Armando Méndez, Guzmán Corujo, Mathías Laborda, Matías Viña; Rafael García, Felipe Carballo, Santiago Rodríguez, Matías Zunino, Gonzalo Castro (65’ Sebastián Fernández), Matías Zunino (78’ Pablo Barrientos) y Gonzalo Bergessio (74’ Thiago Vecino). DT: Álvaro Gutiérrez.
Goles: 61’ Gonzalo Castro (N), 67’ Guzmán Corujo (N).
Expulsado: 68’ Enzo Martínez (P).

Nacional se quedó con el Torneo Clausura al vencer por 2 a 0 a Peñarol en el Estadio Centenario en la gran final de la segunda parte del Uruguayo, y ahora ambos irán por el título mayor.
Dentro de lo que se esperaba en la previa, ambos mostraron la ambición de quedarse con el partido, aunque fueron los carboneros los que llegaron con peligro en los primeros minutos.
Nacional sorprendió con adelantar a Zunino y plantar a Méndez en el lateral derecho, mientras que rápidamente Pellistri mostró su mejor faceta y comenzó a complicar por el sector derecho del ataque.
Un remate de Canobbio de media distancia, que rechazó Mejía, confirmaba que el carbonero mostraba una mejor cara.
Las revoluciones bajaron por momentos, Castro avisó con remate de media distancia, y a partir de allí Nacional comenzó a reaccionar, al punto que transformó a Cardozo en la figura de esa primera etapa.
El juvenil golero carbonero le evitó por dos veces la caída de su arco y más adelante controlaría ante Bergessio.
Peñarol comenzaba a sufrir, y para colmo vio como mermaban posibilidades en ataque ante lesión de Viatri, por el que entró Xisco.
Peñarol reaccionó otra vez apenas comenzado el complemento, pero las cosas cambiaron rotundamente en cuestión de siete minutos, en los que no solo Nacional fue contundente sino que además se quedó con un jugador de más como para controlar lo que restaba de partido. Luego de que Mejía volviera a sacar ante Acevedo, llegó el pase de Zunino para Castro que recibió en el área y definió para abrir la cuenta. Nacional no le dio lugar a la reacción a un equipo que sintió ese golpe, ya que poco después Corujo, tras conectar de cabeza en un tiro libre, mandó la pelota contra el caño derecho de un Cardozo que, esta vez, nada pudo hacer.
Las cosas se complicaban para Peñarol, pero podrían ponerse peor: apenas un minuto después llegó la expulsión de Martínez por un codazo. Uno quiso recomponerse en la mitad de la cancha, el otro dar el golpe de gracia sumando en ofensiva.
No pudo ni uno ni otro, pero Nacional ganó bien, con claridad y merecidamente esta final del Clausura, sabiendo que debía festejar mesuradamente porque ahora se viene la lucha por el premio mayor. Fueron siete minutos claves, en los que el tricolor sacó ventaja y dominó sin problemas para levantar la copa, y elevar el ánimo de cara a la definición del año.