Para las próximas jornadas se anuncian temperaturas superiores a los 35 grados, lo que significa un llamado de atención para los productores que deben realizar manejo de ganado en estos días. “Cada vez que llega el verano es un tema relevante, y más en el norte del país, en donde las temperaturas elevadas y extremas son más frecuentes”, manifestó a EL TELEGRAFO, el ingeniero agrónomo Rómulo César.
Para el técnico en el departamento de Paysandú del Instituto Plan Agropecuario, entre las medidas “se insiste en evitar el estrés calórico, que es lo que causa perjuicios en los animales, que incluso puede provocarles la muerte”.
De todas maneras, sostiene que las medidas de manejo “son diferentes para cada predio, porque depende mucho de la infraestructura con que cuente cada establecimiento, y algunos están más preparados que otros para enfrentar este tipo de situaciones”.
En las horas de mayor calor, “se debe evitar el arreo de los animales, y en la medida que sea posible facilitar el acceso a sombra y agua”. En el caso de que sea necesario en estos días trabajar con los animales, “hacerlo con la mayor precaución posible, intentando que el ejercicio físico no sea un aspecto que contribuya a la aparición del estrés calórico, que está asociado a la temperatura pero también la humedad y el viento”.
Respecto al agua, el profesional reconoció que en los últimos años “se ha mejorado por parte de los productores, en las fuentes y en la distribución del agua, y el acceso”. Y se refirió a que en el departamento de Paysandú en el último llamado del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) en el tema “Más Agua para producción, hay en el entorno de 100 propuestas prediales que tienen en común lo atinente a la fuentes de agua”.
El cómo acceder los animales al agua, “es otra gran línea de trabajo que es más incipiente”, dijo Rómulo César, explicando que hay productores “que han logrado que los animales no accedan a los tajamares, o lagos artificiales, colocando bebederos y permitiendo que tomen agua fresca y limpia”.
Además, señaló que está comprobado que en días como los que se avecinan, “la performance animal se ve seriamente afectada si no logra acceder a sombra”. Se refirió a trabajos realizados en Facultad de Agronomía de Paysandú, que indican “que animales con acceso a sombra, tienen una diferencia de 14% en la ganancia de peso, respecto al ganado que con la misma pastura no logra acceder a la sombra”.
LECHERÍA
En el sector lechero, “es importante que el ganado no salga a pastorear en estos días de altas temperaturas, aunque de hecho desde que comienza a sentirse el impacto del sol no quiere ir a las pasturas”, expresó a EL TELEGRAFO el ingeniero agrónomo Enrique Colzada.
El responsable del departamento técnico de Conaprole para el norte del país, dijo que “es importante la sombra y el agua, y procurando que entre las 10 y 17 horas el ganado tenga esas comodidades, pastoreando en el atardecer, noche y a la mañana temprano”.
También se refirió en el caso del ganado en producción, “evitar las caminatas largas en las vacas, procurando en la medida que sea posible ubicarlas en potreros cercanos a la sombra y agua”. Precisó que “la caminata genera pérdida de energía, y si le sumamos eso al estrés calórico, complica más”.
Sobre la remisión de los tambos, explicó que setiembre y octubre fueron meses buenos para la producción de leche –similares al año pasado–, en noviembre cayó más que en 2018 por días de calor bastante fuerte, acentuándose en lo que va de diciembre por la falta de lluvias.
NIVELES DE RIESGO
La Unidad de Agroclima y Sistemas de información (GRAS) del Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA), advirtió sobre los niveles de emergencia para el litoral oeste. Las medidas de manejo recomendadas por GRAS INIA, incluye el disponer acceso ad libitum a agua fresca y de buena calidad. En los bebederos, duplicar el ofrecido de frente de bebedero, para que los animales tengan mejor acceso al agua. De ser posible, 7 centímetros de frente por bebedero.
Evitar el movimiento del ganado en las horas de mayor calor o hacerlo en las horas más frescas del día. Asegurar la provisión de sombras naturales o artificiales (techos, cobertizos, mediasombra). Para sistemas de engorde a corral, se recomienda que la sombra tenga 4 metros de altura, 4m²/animal y una inclinación de 15º para que no se acumule agua. La condición de corrales con buen piso es una solución, pero la cantidad de agua y la producción de barro pueden ser factores limitantes. Cambiar el horario de la entrega de ración para que no coincida la digestión con los horarios de mayor ITH. Se recomienda suministrar algunas horas después (2 a 4) de la temperatura máxima del día. También es importante, siempre que sea posible, cambiar la densidad energética de la dieta, disminuyéndola.
