El departamento de Paysandú presenta interesante crecimiento de las pasturas debido a buenas lluvias

Ingeniero agrónomo Rómulo Cesar.

En los últimos 20 días de diciembre y lo que va de enero, la zona oeste del departamento de Paysandú, “ha recibido mayores volúmenes de agua y tienen altos crecimientos de pasturas y buen desarrollo de los cultivos sembrados”, señaló a EL TELEGRAFO, el ingeniero agrónomo Rómulo César.
El técnico del Instituto Plan Agropecuario explicó que “si uno transita por ruta 3 al norte, verá campos con mucho pasto y buenas aguadas en toda su trayectoria por el departamento. Pero no obstante, con niveles de lluvias menores, en el resto del departamento, donde están los suelos más superficiales (basalto), y con menor capacidad de almacenar agua, los registros también han sido buenos”, indicó
En la información que presenta INIA Grass respecto a la respuesta del suelo, uno de los datos que señala es bastante asimilable al agua que presentan las pasturas y vegetales en general.
Si se mira el mapa de Uruguay desde mediados de noviembre hasta ahora, “marca a grandes rasgos dos zonas”, dijo el profesional: “una al norte del río Negro, y otra bastante distinta al sur. Al norte las lluvias han sido claramente superiores respecto al resto del país”.
En el último dato del 10 de enero, “había zonas en la región centro y sur del país, en donde los niveles de agua en el suelo son críticos, factor limitante para el crecimiento de pasturas”.

PASTURAS

En términos generales, César indicó que las pasturas naturales el año pasado “se movieron más tarde. Tradicionalmente a fines de agosto los campos comienzan a pintarse de verde, pero en la práctica y con la información satelital que maneja el Plan Agropecuario, esto se dio mucho más tarde”.
Durante agosto, setiembre y parte de octubre “las pasturas estuvieron bastantes frenadas y demoraron en venir. Esto se debe a que el régimen de lluvias fue muy desparejo. Llovió muy bien en agosto, muy poco en setiembre y hubo exceso de precipitaciones en octubre”, dijo. La primavera fue “bastante destemplada, porque hubieron heladas, hizo frío y hubieron bastantes días nublados, lo que determinó que los campos se movieran fuerte desde fines de noviembre para adelante”.
Y sostuvo que “las tasas de crecimiento de las pasturas se han mantenido porque las lluvias no han cesado y por lo tanto los campos presentan buena disponibilidad de forraje”.

GANADO

El profesional se refirió al ganado y especialmente al rodeo de cría, categoría que “hoy tiene rol protagónico debido a la atención que el productor debe prestarle”. Reiteró que la primavera “demoró en venir (alargándose el invierno), lo que llevó a que todavía en algunos predios le está pasando factura a los productores”. En los predios en donde el ganado parió sobre fines de agosto, y gran parte de setiembre, “parieron a fines del invierno llegando justo con el pasto, pero fue una primavera que demoró en hacerse presente, lo que trajo aparejado que en algunos lugares el ganado sintiera el impacto, retrasando que los vientres reiniciaran la actividad sexual y se agilizara el proceso de entore”.
Y reiteró que “si bien las pasturas y el ganado están bien, seguramente cuando pasemos raya, el entore se haya visto demorado, y tengamos preñeces más tarde que los años anteriores”.
Se refirió a datos del entore antes de fin de año, con información de dos predios, y que realizaron la técnica de diagnóstico de actividad ovárica. “En uno de ellos, el 80% de las vacas ya estaban ciclando, con un bajo porcentaje de vacas en anestro, y éstas estaban en anestro superficial, animales que rápidamente se podrán entorar”.
Y en el otro predio, que es de mayor escala, “el porcentaje era de un 60% de vacas ciclando y un 40% de vacas en anestro, con la salvedad que esos vientres estaban básicamente en anestro superficial, lo cual es una buena noticia, porque es sabido que hay técnicas como la puesta de tablillas que contribuye favorablemente a que esas vacas puedan reiniciar rápidamente la actividad sexual”.
En estos días, Rómulo César expresó que “tuvimos información de un rodeo de bastante mayor escala, en una situación de campos más complicados, en donde el dato de vacas en anestro andaba en torno al 50%, y en donde gran parte estaba en anestro superficial”.

SE EMPAREJÓ

El productor Carlos Artía señaló que “el agua se emparejó y llevamos más de 90 milímetros en enero, y con cuatro episodios de lluvias y sin generar problemas de granizo u otro inconveniente, podemos decir que hasta ahora viene a pedir de boca”.
El establecimiento del productor está en Costa de Laureles, en Cuchilla San José, ubicado 19 kilómetros al norte del mojón 134 de ruta 26, en el límite con el departamento de Salto. “Tenemos mucho pasto y es bueno para rotar las haciendas en los diferentes potreros”, agregó.