Aunque fueron luego interrumpidos por la intensa lluvia que cayó en la víspera, temprano en la mañana de ayer equipos viales municipales iniciaron los trabajos preparativos para recuperar algunas cuadras en el barrio Vista Hermosa, en las calles Felipe Argentó y Grito de Asencio entre Juan de Almagro y José de San Martín.
“El pavimento está muy afectado, razón por la cual se hace necesario intervenir con trabajos viales; es la misma zona donde en acuerdo con vecinos y OSE realizados trabajos de conexión a la red de saneamiento”, dijo el director general de Obras Marcelo Romero.
Cuando lo permita el estado del tiempo, se realizarán trabajos de fondo, recuperando la sub base y realizando pavimento bituminoso. “Esta obra está relacionada con la recuperación del pavimento”, advirtió Romero, para luego indicar que “no desconocemos que en la zona hay problemas importantes de anegaciones de viviendas cuando ocurren lluvias fuertes o muy fuertes. En ese sentido llevamos adelante otros trabajos. Una máquina está destinada a limpiar el cruce de agua en Enrique Chaplin y 52 Sur, retirando la espesa vegetación y residuos que van quedando en el lugar. Todo eso obstaculiza el escurrimiento del agua. Esta acción complementa otra que se lleva adelante limpiando cunetas, con el mismo objetivo. Esta tarea no solamente se realiza en Vista Hermosa sino en otras partes de la ciudad que viven situaciones similares, incluyendo la margen del arroyo Sacra. En la medida que los cauces y las cunetas a la vera de las calles estén limpios, será menos probable anegamientos de viviendas de quienes residen en esas áreas”.
Romero también destacó que más allá de las tareas que realiza o pueda realizar en el futuro la Intendencia hay razones estructurales que son de difícil solución. “No hay dudas que, desde hace muchos años, hay viviendas que han sido construidas cuando el concepto de cambio climático no existía, por que fueron levantadas a un nivel muy bajo. Con cada vez mayor frecuencia hay episodios de intensas lluvias que en pocas horas alcanzan tal intensidad que rápidamente inundan esas viviendas. Es un problema muy serio, porque se pierden pertenencias y porque también pueden generarse problemas de salud. Al mismo tiempo, es de muy difícil solución”.
“Parece que claro que habrá que establecer un plan a mediano plazo, con una fuerte inversión pública pero también privada, para dar solución al problema de viviendas que están en un nivel tan bajo que rápidamente son inundadas ante estas intensas lluvias que vienen como consecuencia del cambio climático. Cuando le planteamos el tema a los ingenieros estos dicen muy claramente que cuando se hicieron las fórmulas matemáticas que se utilizan para diseños viales o de viviendas no llovía tanto y los parámetros utilizados eran otros. Hay nuevos volúmenes de agua que van ciertamente a modificar los parámetros. Hay que planificar diferente”, explicó también el director general de Obras.
Citó luego el caso de calle Ayacucho, cuyo nivel fue rebajado pero que no logró solucionar el problema de un grupo de vecinos en Ayacucho y Rodríguez Nolla. “En Ayacucho se hizo todo lo posible pero no se puede ir más abajo del nivel del cauce del arroyo La Curtiembre. Al recuperarse la calle se generó una superficie cubierta que ya no absorbe agua y el cordón cuneta hace que el agua desagüe en una única dirección”.
Esta obra “solucionó los problemas de anegamiento para unas trescientas familias, pero quedó un grupo que mantiene o tiene ahora esa problemática. Lamentablemente no se le puede pedir más a la obra que lo que puede resolver. Hay que dejar en claro que aunque hay viviendas que ahora se inundan no es por causa de la obra sino por algo más general y complejo, el cambio climático. Obviamente, seguiremos trabajando y buscando soluciones para todos los vecinos”.
