Policía trabaja en tres hipótesis sobre robo de armas a efectivos

La investigación aún no encontró conexiones entre las hipótesis con los hechos delictivos a efectivos policiales.

(TELENOCHE)
En lo que va del año, 78 uniformados fueron víctimas de delitos y las investigaciones no han encontrado conexiones entre los hechos. La primera y más fuerte hipótesis que maneja la Policía Nacional es que narcotraficantes uruguayos pagan “importantes sumas de dinero” a delincuentes para asaltar a los agentes y quitarles sus armas. Según el director de la Policía, Mario Layera, “una mayor demanda por parte de narcotraficantes de obtener la pistola glock que utilizan los policías”.
El tráfico de armas hacia Brasil se maneja como segunda hipótesis porque, de acuerdo al jerarca, algunas armas hurtadas en Uruguay fueron incautadas en Brasil. “Puede que se haya fortalecido la demanda a través de narcos y distribuidores de drogas para ser traficadas hacia Brasil”, afirmó.
La última hipótesis que maneja la Policía es que los narcotraficantes han perdido armamento en incautaciones de la Policía y que necesitan recuperar su poder de fuego. En 2019 se destruyeron 7.289 armas de las cuales solo 2.000 eran armas viejas de las fuerzas. Las restantes 5.000 fueron incautadas en procedimientos. Layera reconoció que la aplicación de la ley de tráfico de armas desde el año 2016 llevo a “controles firmes” y figuras penales vinculadas al tráfico ilícito. “Hay menos disposición de armas en el mercado para criminales y es un elemento por el que van a buscar a los policías y guardias de seguridad”, insistió.