Una vecina del barrio Curupí, que asegura estar cansada de reclamar, se comunicó con EL TELEGRAFO para dar a conocer su situación. Dijo que en su casa no hay agua potable hace ya tres años. “Nosotros hace años que estamos acá, tres años. Siempre tuvimos problemas de agua pero al menos otros años llegaba la noche y podíamos usar agua para lavar la ropa, los platos. Después de un tiempo, acá ni en invierno salió agua”, expresó.
“Fuimos varias veces a reclamar a OSE, tanto yo como los demás vecinos afectados y no tuvimos respuesta, cada vez que voy y cuento mi problema siempre es la misma respuesta: ‘bueno, ahora lo que queda es esperar’”. También cuenta que el ente mandó a una trabajadora social, la cual denotó que muchos vecinos del barrio estaban colgados del “caño madre”, a lo que la vecina expresó: “mandaron una asistente social desde OSE hace un mes y medio, porque se levantó firma con los vecinos y todo por la falta de agua. Estuvo casa por casa y el diagnóstico que sacó es que hay muchas casas enganchadas, y ellos sí tienen agua, y acá no sale ni una gota”.
Expresó que el gran problema, según la empresa, es que el caño madre es chico para la cantidad de población que habita en la zona. “Esto pasa solo en esta cuadra, de los dos lados, y solo cuatro tenemos contadores”, aclaró la señora. “Hay gente que está enganchada porque iban a pedir conexión a OSE para que le pusieran el contador y nunca les pusieron, entonces no les quedó otra, por la necesidad, que engancharse”. OSE ya se encuentra tomando las medidas y según algunas fuentes hay personal técnico evaluando la situación.
La vecina destacó: “no se nos ha ofrecido ni traer un camión con agua, nos hemos manejado con bidones, llenando una tarrina, de ahí sacamos para bañarnos, lavarnos las manos, cocinar, para tirar en el baño. Yo me he querido asesorar qué hacer para terminar de pasar el verano, porque con las criaturas no se puede. La única respuesta concreta fue la asistente social de OSE, pero nada para pasar esta situación de emergencia”.
“La respuesta de la asistente social es que iba a entrar a mi cuenta de OSE para ver todos los reclamos que tenía. Reclamos tenemos muchísimos, en un mes fui cuatro o cinco veces”, aseguró la señora.
