La Blanca chica se aferra a un partido de 120 minutos

La Sub 17 trabajó en el Complejo Don Bosco pensandoen el choque del sábado ante Dolores.

La selección Sub 17 trabajó intensamente en el Complejo Don Bosco, continuando con la planificación de cara al partido que el sábado a la hora 19.30 jugará en el Estadio Artigas ante Dolores, en la segunda final del Regional Norte Litoral de la Copa Nacional de Selecciones.
La Blanca chica cambió de horario de entrenamientos, y a partir de ahora se movilizará en la tarde, teniendo en cuenta el inicio de las clases liceales.
Ayer, por lo pronto, luego de las tareas de fuerza preventiva ordenadas por el preparador físico, fue tiempo de trabajos técnicos para dividir posteriormente al plantel en dos para trabajar en cada una de sus líneas, apostando a la superioridad numérica, la tenencia de pelota y la definición.
En cada práctica se intentan ajustar piezas, poner en práctica la idea con la que se encarará este partido que para la Blanca espera ser de 120 minutos, dado que necesita ganar en el tiempo reglamentario para igualar el 1 a 0 a favor de Dolores en el partido de ida, y marcar la diferencia luego en el alargue para quedarse con el título.
“El objetivo será tratar de convertir lo antes posible. Hacer una diferencia para manejar el partido y tener el desgaste mínimo pensando en el alargue. Estamos convencidos de que tenemos que definir en la prórroga, pero sabemos que Dolores es fuerte, se defiende bien y nos costó entrarle en el partido de ida, pero venimos trabajando para revertir la situación”, dijo el entrenador Álvaro Ilaharregui.
El cuerpo técnico no quiere dejar detalle librado al azar. Por eso “es importante analizar el equipo inicial y también las posibles variantes, porque pensamos en un partido de 120 minutos, siempre pensando en que podemos ganar en los 90”, tiró el DT.
El plantel está prácticamente todo a disposición, con la vuelta de Stagno, y las ausencias del lesionado Campanella y del expulsado Badía.