“Necesitamos la colaboración de todos ustedes. Vamos a fabricar un respirador mecánico de bajo coste. Necesitamos para la parte electrónica motores PAP o motores de corriente continua. Toda impresora o viejas lectoras de CD lo contienen. Sumate”.
El pedido comenzó a circular en Facebook hace un par de días, con un pequeño esquema de la construcción y funcionamiento del respirador.
“No queremos publicidad”, fue lo primero que dijo Javier, quien respondió al número de celular que acompañaba a este llamado a la solidaridad en Facebook, donde hoy se pone a prueba la credibilidad de cada posteo.
“Es real: tenemos pensado construir respiradores mecánicos. ¿Si es complicado? Es muy fácil”; remarcó quien amablemente dialogó con EL TELEGRAFO aunque sin dar demasiados detalles en cuanto al grupo de personas que está detrás de esta iniciativa que tiene como único objetivo la construcción de respiradores a ser utilizados en caso de que la pandemia de coronavirus que azota al mundo entero comience a hacerse fuerte en nuestro país.
“¿La iniciativa cómo surgió? Fácil. Hay un hijo que tiene a su padre al lado, y escucha que como es viejo no tiene derecho a vivir. Eso está sucediendo en Europa y ¿sabés por qué? Porque no alcanzan los respiradores. Y no queremos que eso pase en Uruguay”, remarcó Javier.
El posteo publicado en Facebook el sábado, recorrió el país. Y la respuesta fue inmediata.”Ayer (domingo) se comunicó un jerarca de ASSE y estamos esperando un nuevo llamado para ver si podemos contar con un lugar físico para poner en marcha el trabajo: armar un prototipo y ver su funcionalidad”, explicó más allá de asegurar que en caso de que ASSE no diera una respuesta positiva, gracias a la colaboración de la gente podría decirse que ya se cuenta con ese lugar para comenzar a trabajar.
El respirador mecánico en el que se trabajará “cumplirá una función básica”, y está claro que “no serán comerciales” y que “se utilizarán si todo esto se complica”.
Detrás de la iniciativa hay “médicos, ingenieros, un grupo de electrónica y mucha gente”, que ofreció a sumar su granito de arena en procura de concretar esta iniciativa solidaria que apunta, nada más y nada menos, que a salvar vidas. Javier apuntó que “la idea no es nuestra, no inventamos nada, pero se está dando esta situación y no podemos quedarnos con los brazos cruzados. Tenemos que plantearnos algo: ¿nos quedamos sentados a esperar que nos inunda la guerra, o la peleamos?”
Y quiso desde la capital hacer un llamado a los más jóvenes. “Parece que no se dan cuenta de lo que está pasando. Los vemos en las calles, no se cuidan. Y no se dan cuenta de que pueden contagiar. Hay que hablar con nuestros hijos de manera clara”.
El celular al que pueden comunicarse quienes quieran colaborar con la iniciativa (“hay gente de Paysandú que se ha puesto a disposición”) es el 094 065 285.
