La Justicia resolvió formalizar a dos hombres de 25 y 26 años al comprobarse su responsabilidad en delitos referentes al porte y tráfico de arma de fuego, así como una rapiña perpetrada en un comercio de la ciudad en que se llevaron ocho mil pesos. Asimismo, la fiscal Cecilia Irigoyen indicó a EL TELEGRAFO que se pidió como medida cautelar la prisión preventiva de ambos, por 180 días, plazo en que se trabajará para recoger mayores indicios que permita vincularlos a otras cuatro rapiñas.
Como se informara, personal del Grupo de Respuesta Táctica se encontraba realizando un patrullaje rutinario en la zona céntrica cuando el comisario a cargo vio una motocicleta Yumbo Max con dos hombres a bordo. Les llamó la atención que el rodado llevara la chapa matrícula doblada hacia arriba, evitando así que se viera la numeración. Les dieron la voz de alto para poder identificarlos pero hicieron caso omiso y el conductor aceleró para darse a la fuga. A una cuadra, en Uruguay y Setembrino Pereda, quien viajaba como acompañante, Víctor Matías Antúnez Zeballos (con antecedentes por estafa), saltó de la motocicleta y continuó a pie a la vez que quiso desprenderse de un arma de fuego, lanzándola hacia el techo de una casa. El hombre fue detenido y el arma cayó en la vereda, junto a un casco integral, por lo que fue incautada.
En tanto, Brian Ezequiel Irigoyen Oroná (poseedor de antecedentes por hurto) se fugó en motocicleta. Pero al intentar evadir a un policía, perdió el control del rodado y embistió un portón metálico en la cuadra de Artigas y Setembrino Pereda.
Personal de Policía Científica hizo el relevamiento del arma incautada, tratándose de una pistola calibre .32, la cual habría sido la utilizada en al menos cinco rapiñas en el último mes.
TRABAJO COORDINADO POR FISCALÍA
La detención de Antúnez e Irigoyen, la incautación del arma, las características de la motocicleta, vestimenta y fisonomía de los sujetos hizo sospechar que podría tratarse de la pareja de rapiñeros.
La Fiscalía de Cuarto turno, a cargo de la doctora Cecilia Irigoyen, tenía para investigar la rapiña del 29 de febrero en la distribuidora de Sarandí y Paz y la del 31 de marzo en Casa Campo. Este último hecho surge de la denuncia de un hombre que estaba detrás del mostrador de Casa Campo, usando el celular, cuando ingresó un desconocido. Mediante amenaza con arma de fuego, éste le exigió la entrega del dinero, llevándose 8.000 pesos y un celular. Agregó que el delincuente era esperado por otro a bordo de una motocicleta.
En el medio hubo otras rapiñas: el 3 de abril en el 24 horas Nacho, el 9 de abril en la estación de servicio de Francolino, el 11 de abril en la carnicería El Halcón. “Estas pertenecen a otra Fiscalía, pero una me la pude asignar, que es algo que hacemos los fiscales, para ver si podemos reunir elementos para trabajar en conjunto”, comentó Irigoyen.
Desde el 29 de febrero hasta el 11 de abril “había cinco rapiñas en que quizás por el arma, por la vestimenta, por la moto, podían estar vinculadas a estas dos personas. Con los elementos que contábamos me dio para formalizar por las armas y por la rapiña de Casa Campo donde había más indicios. Pero no logramos condena. Ellos (Antúnez e Irigoyen) se opusieron a reconocer su responsabilidad. Por eso pedí una medida cautelar de prisión preventiva y una audiencia que duró casi dos horas y fue muy peleada por la defensa, donde finalmente logramos la prisión preventiva para continuar la investigación. Hay pericias pendientes de balística y otras, como por ejemplo el reconocimiento de las víctimas”, dijo la fiscal a EL TELEGRAFO.
Por su parte, finalizada la audiencia, la Justicia Penal dispuso la formalización de la investigación de Víctor Matías Antúnez Zeballos y Brian Ezequiel Irigoyen Oroná, imputados por “un delito de trafico interno de armas en concurso formal, con un delito de porte o tenencia de arma de fuego en lugares públicos, y un delito de porte o tenencia de arma de fuego por reincidente en reiteración real, con un delito de rapiña especialmente agravada por uso de arma de fuego y por la pluriparticipación”.
