El director nacional de Aduanas, Jaime Borgiani, se reunió en las últimas horas con dirigentes del Centro Comercial e Industrial de Paysandú, en la sede de la institución, oportunidad en la que se intercambiaron puntos de vista sobre la problemática comercial fronteriza y evaluando alternativas para el escenario pospandemia, habida cuenta de la situación que vive el comercio sanducero.
En este encuentro participó el diputado Nicolás Olivera, quien expresó a EL TELEGRAFO que la idea que primó en el encuentro con el jerarca máximo de la Dirección Nacional de Aduanas fue la de tratar de establecer un punto de equilibrio en el intercambio fronterizo, en este caso a través del puente General Artigas, “para que no se pase de ocasiones en que se aplica el cero kilo al de una permisividad total, porque eso no sirve. De lo que se trata es de buscar el mayor equilibrio posible, atendiendo realidades y al hecho de que hay ocasiones en que el cambio favorece a uno y otras veces a otros”.
Recordó Olivera que el planteo del Centro Comercial en cuanto a establecer mecanismos para cuando se vuelva a la normalidad tras la pandemia refiere a la realidad comprobada de que pese a la crisis sanitaria, el cierre del paso por el puente ha resultado beneficioso para el comercio local, donde se han incrementado las ventas desde el cierre, lo que indica que los comercios se han visto afectados fuertemente por las compras que se han efectuado en la vecina orilla.
Estos aspectos fueron expuestos ante el director nacional de Aduanas por los empresarios locales, ante lo que entienden una necesidad de que se vaya previendo la forma de actuar cuando se supere la pandemia, de forma de preservar los puestos de trabajo en Paysandú a través de medidas adecuadas que contemplen los intereses en juego.
Al respecto consideró Olivera que “los comerciantes están preocupados respecto a como va a ser el día en que se reinicie la actividad en la frontera, cuando se reabra. En ese sentido es pertinente la preocupación de los comerciantes, porque nos permite un tiempo para que Aduana vaya adoptando esa postura. Los comerciantes han expresado que pese a la pandemia, sus ventas incluso han crecido en algunos rubros, como consecuencia del cierre del puente. Eso indica que Paysandú estaba pasando, dentro de sus muchos problemas laborales y comerciales, por una agudización como consecuencia de la problemática del puente”.
Consideró que “hubo puntos de vista concordantes en cuanto a la necesidad de encontrar un punto de equilibrio, teniendo en cuenta que Paysandú ha probado desde el cero kilo, que es la prohibición total, hasta los últimos meses en que vimos en que pasaba más de lo que debía pasar. Creo que ninguno de los dos extremos es bueno, hay un punto medio y el director nacional de Aduanas coincide en que tiene que haber un libre tránsito de bienes y servicios, por supuesto, en el entendido que debe haber racionalidad, un criterio de razonabilidad”.
“Se apunta a que todas las medidas que se vayan a tomar no perjudiquen al comercio local y tampoco a la gente que está en su derecho de ir de u lugar otro”, puntualizó el representante sanducero.
