Concluyó la entrega de viviendas del Plan Realojos a familias que residían en La Chapita

En los barrios Jardines y Esperanza concluyó la entrega de viviendas enmarcadas en el Programa Realojos, destinadas a familias que residían en la zona inundable y expuesta a la contaminación en La Chapita.
El miércoles se entregaron 21 y las restantes 17 ayer jueves. Este proceso se completará “cuando se entreguen las 4 que se construyen en San Félix”, dijo a EL TELEGRAFO el intendente, Mario Díaz.
Explicó que “la zona del realojo viene cambiando sustancialmente como resultado de las acciones que se desarrollan en el Parque Municipal”, cercano unos cien metros de las nuevas viviendas. La totalidad de las familias que recibieron sus llaves el miércoles hicieron sus respectivas mudanzas y otros, cuyas llaves fueron entregadas ayer, aguardaban con sus muebles para ingresar el mismo día de la entrega. “Las familias accederán en un comodato a diez años y al finalizar ese período serán evaluadas”, agregó.
La Ministra de Vivienda, Irene Moreira, se encuentra convaleciente por un problema de salud, sin embargo, en diálogo con Díaz reconoció la necesidad de postergar el acto formal y concretar la entrega de los complejos habitacionales.

MÁS DE 300 VIVIENDAS

Díaz informó que en el último período “hemos puesto el foco en las familias que estaban por debajo de la cota 6,50, totalmente inundable, y nuestra intención es aumentar cada vez más esa cota, de manera de no tener evacuar a una cantidad significativa de familias”.
Consultado por la cantidad de viviendas construidas durante el quinquenio, el jefe comunal recordó que la adquisición de tierras para los distintos programas de construcción forma parte de la política habitacional en la gestión que comenzó con Guillermo Caraballo. “Fue fundamental establecer una cartera de tierras con la compra de la ex Paylana, para desarrollar un proyecto urbano que determina la construcción de más de 500 viviendas. Paralelamente hemos trabajado con el Programa de Rehabilitación Urbana, que ha sido muy exitoso en convenio con el Ministerio de Vivienda con la intervención y recuperación de viviendas”, relató.
El intendente agregó que a esto “deben sumarse las obras de caminería y alumbrado, que mejoraron la calidad de vida de unas 10.000 familias de Paysandú a través de la urbanización de siete barrios. Y las intervenciones en La Chapita regularizan un atraso histórico”.
El director de Obras de la Intendencia, Marcelo Romero, resumió que se habrán construido “más de 350 viviendas al finalizar la actual administración. De allí se desglosan 224 realojos, además de planes puntuales y construcción de viviendas en barrios”.

REGULARIZACIÓN DOMINIAL

Romero resaltó que este proceso no culmina con la entrega de viviendas a los beneficiarios de los distintos planes, sino con la “regularización dominial”, en tanto su gestión encontró “construcciones con una antigüedad de más de treinta años y sin fraccionamiento”.
De acuerdo al jerarca, “eso obstaculizaba que los usuarios que regularizaron sus pagos ante el Banco Hipotecario de aquel entonces, ahora con la Agencia Nacional de Viviendas, pudieran avanzar en algo tan importante como los títulos. Ya tenemos cinco barrios en proceso de fraccionamiento y seguirán con cinco más. Después quedarán los barrios que aún tienen problemas con las construcciones”. A estas unidades, “se suman las exoneraciones a las cooperativas del Plan de Vivienda Sindical, a las que se hacía inviable el pago de los derechos del fraccionamiento. Lo plantearon ante la Intendencia, que solicitó la exoneración en la Junta Departamental”.
Díaz recordó que algo similar ocurrió con los barrios IC. “Allí encontramos a personas con 80 años que habían terminado de pagar su casa pero no tenían los títulos. La Intendencia resolvió contratar los agrimensores y asumir bajo su costo el fraccionamiento de esas viviendas para que luego hicieran los títulos y quedarse con la tranquilidad de que la propiedad quedaba a su nombre y podían legarla a sus hijos sin problemas”.