Ola de calor y probables tormentas fuertes

Calor sofocante y fuertes chaparrones provocan un clima en extremo inestable en la región, con temperaturas que pueden alcanzar los 41ºC y lluvias intensas en cortos períodos de tiempo, precisamente cuando en áreas pobladas se producen inundaciones repentinas. En Paysandú, alertas del Instituto Uruguayo de Meteorología (Inumet) rigen para ambas situaciones atmosféricas.

Inumet informó “un gradual y sostenido aumento de las temperaturas y también de las sensaciones térmicas; alcanzando el umbral de ola de calor el norte y centro-oeste del país”, hasta el domingo, cuando las temperaturas descenderán ligeramente.

Una masa de aire cálida y húmeda afecta la región generando temperaturas extremas, lo que provoca una nueva ola de calor.

Pero además una perturbación atmosférica asociada a la misma, puede generar tormentas, algunas puntualmente muy fuertes. En algunas zonas no se descarta la caída de granizo, intensa actividad eléctrica o rachas de viento muy fuerte. Obviamente, las tormentas fuertes reducirán el efecto de la ola de calor, haciendo descender levemente –aunque en forma temporal– la temperatura.

Expertos meteorólogos advierten que con una masa de aire excepcionalmente caliente, el calor extremo acaba inyectando una enorme cantidad de energía a la atmósfera, y la forma en que el sistema atmosférico libera esa energía es a través de las tormentas. De hecho, los aumentos excesivos de calor no solo aumentan la probabilidad de que ocurran tormentas aisladas, sino que aumentan el riesgo de que sean demasiado fuertes o severas.