
Con el anuncio del presidente de la República, Luis Lacalle Pou, de que comenzarán las negociaciones entre Uruguay y China para la firma de un Tratado de Libre Comercio (TLC), es una excelente noticia para el sector primario. Sin dudas, la más trascendente de los últimos años, sostiene un informe de la consultora Tardáguila Agromercados. Ni que hablar en el caso de la carne vacuna. Quizás sea la instancia más importante –de prosperar– desde que se creó la categoría de libre de aftosa con vacunación en el ámbito de la Organización Mundial de la Salud Animal (OIE).
Uruguay paga una tasa de 12% para ingresar productos cárnicos al mercado chino, al igual que los demás países del Mercosur. No es el caso de los de Oceanía, quienes tienen firmados desde hace varios años sendos TLC con China que, año a año, van reduciendo la tasa. Australia, por ejemplo, firmó el tratado sobre fines de 2015; en 2022 paga 2,4%, el año que viene 1,2% y a partir de 2024 la tasa queda en 0%. Nueva Zelanda paga 0% de arancel desde 2016. Más cerca, Chile también cuenta con un TLC con China e ingresa con sus carnes –lo poco que exporta– a 0%.
Uruguay aventaja a los demás países de la región en sus condiciones de acceso a varios mercados, pero estas se han ido achicando en los últimos años. Anteriormente era el único del Mercosur que llegaba con carne fresca a Estados Unidos y Canadá. Hoy también lo hace Brasil, Argentina vende a Estados Unidos y Paraguay está golpeando la puerta. Anteriormente los demás países regionales tampoco accedían a China y ahora lo hacen, aunque Brasil por el momento sigue impedido de exportar productos con hueso. A Uruguay le queda la ventaja de Corea del Sur y Japón, pero los vecinos también negocian para entrar, aseguran desde Tardáguila.
Desde el punto de vista sanitario siempre hay para ganar, pero el partido, en cuanto al ingreso de divisas, ahora pasa por una mejor inserción en los países a los cuales ya se exporta. Ni que hablar que China es el más trascendente en este sentido.
Gonzalo Oleggini, experto en comercio internacional, en Valor Agregado, de radio Carve, dijo que usualmente las negociaciones por un TLC llevan un año y medio. Si eso se cumple, sobre principios de 2024 se podría estar firmando el acuerdo. Sería un hito para la producción primaria uruguaya. Y un gran punto a favor para el oficialismo en un año electoral.
COREA ELIMINA ARANCEL
Corea del Sur está eliminando los aranceles a la importación de varios alimentos importados, entre ellos la carne vacuna, con el objetivo de intentar contener la inflación, dijo el medio australiano Beef Central.
Con la inflación del país actualmente en 6%, su nivel más alto en dos décadas, el won coreano en baja y el mercado de valores del país cayendo drásticamente, el presidente coreano, Yoon Suk Yeol, está tomando medidas drásticas, resueltas en reuniones de emergencia del equipo económico que se llevan a cabo semanalmente.
Desde el 22 de junio, el gobierno eliminó el impuesto para la importación de 50.000 toneladas de carne de cerdo y ahora se han agregado más productos a la lista. Desde el 20 de julio hasta al menos el último trimestre de este año, se eliminarán los aranceles sobre unas 100.000 toneladas de carne vacuna importada.
Uruguay paga una tarifa de 40% para acceder al mercado de Corea del Sur. La semana pasada se informó sobre la habilitación para la exportación de bloques y trimmings a este mercado, productos utilizados por la industria para hacer elaboraciones cárnicas.
Australia y Estados Unidos, los dos principales proveedores internacionales del mercado coreano, cuentan con Tratados de Libre Comercio que les permiten ingresar a tasas inferiores. La tasa para la carne de Estados Unidos es actualmente del 10,6%, mientras que la de Australia es del 16%.
El año pasado, Corea importó 250.000 toneladas de carne vacuna de Estados Unidos y 179.000 toneladas de Australia. Uruguay se posicionó lejos atrás con 2.600 toneladas. Pero con la eliminación del arancel es, en principio, el más beneficiado, ya que es quien gozará de una reducción mayor para participar del cupo de 100.000 toneladas. De acuerdo con el USDA, la expectativa es que Corea del Sur este año importe cerca de 600.000 toneladas carcasa de carne bovina, siendo el cuarto principal importador mundial detrás de China, Estados Unidos y Japón.
Con los recortes arancelarios, Corea espera que los precios minoristas locales de la carne de vacuno disminuyan entre un 5% y un 8%.