Circulación “no habitual para la época” de virus, aumenta consultas con pediatras en Paysandú

Doctor Sergio Venturino.

La Sociedad Uruguaya de Pediatría (SUP) se mantiene alerta ante un incremento exponencial de las consultas por virus sincicial respiratorio que afecta a los niños menores de dos años, al comportamiento diferente de las patologías que son habituales en el invierno pero en esta época del año, y a las demandas registradas en las puertas de emergencia en todo el país, tanto en los servicios públicos como en las mutualistas.
El Jefe del Departamento de Pediatría y Neonatología del Hospital Escuela del Litoral (HEL), Sergio Venturino, reconoció que “en los últimos 15 o 20 días las consultas no se comportan como era habitual a esta altura del año. En invierno se implementan otras estrategias en las puertas de emergencia, con un aumento de las horas en las policlínicas. En la pospandemia registramos un número elevado de consultas que se ha mantenido, si bien vemos que el clima no acompaña porque hubo episodios de frío que tampoco son habituales”.

El crecimiento de los casos “está muy por encima. En un día de consultas, el 30 por ciento del total son pediátricas. Pero ahora estamos en torno al 40 por ciento y esta semana hubo días con el 45 por ciento. Son cuadros virales de etiología respiratoria, porque se ven en las secreciones nasales. Y esos cuadros de bronquilitis son comunes en el invierno, pero ahora vemos que se prolongan”, dijo a EL TELEGRAFO.
El médico señaló que “esto también ocurre en Europa. En España, por ejemplo, los casos de virus sincicial y bronquiolitis se presentan en pleno verano y eso no es habitual. Estos cuadros respiratorios suelen presentarse en invierno. Ahora, tenemos que ver si es por efecto de la pospandemia que resurgieron los virus –en este caso los respiratorios– o si tendremos que acostumbrarnos a tener estos cuadros respiratorios aún pasado el invierno”.

Recordó que “este tema también fue comentado en la puerta del Pereyra Rossell por el jefe del servicio, el doctor Álvaro Galiana. También planteaba que había que ver si ese comportamiento es por algo puntual o si hay que prepararse para ver tanta cantidad, porque es un número importante de consultas, tanto en los consultorios como en las puertas de Pediatría. Porque eso provoca un aumento en los tiempos de espera”.

No obstante, informó que “con el aumento de la cantidad de casos, no hubo un aumento de internaciones porque no se trata de cuadros graves”.
Las consultas se incrementaron tanto en los servicios públicos como en las mutualistas y en los llamados a las emergencias móviles. “Estamos en contacto con todos los pediatras y es un comentario generalizado que este aumento por encima del 40 por ciento es muchísimo”.

Por edades

La mayoría de las consultas se reciben por niños en edades preescolares. “Son más frecuentes en los menores de 2 años y lactantes pequeños. Son quienes tienen más riesgo de quedar internados. Este año tuvimos infecciones bajas en bebés de 2 y 3 meses, que tienen más riesgo y tiempo de recuperación. Los cuadros en escolares y adolescentes suelen ser catarrales y más leves. En estos 15 días, se han registrado cuadros similares al resfrío, con cefaleas, fiebre y dolor muscular. Y lo que llama la atención es el dolor muscular y el cansancio, que es típico de los cuadros virales”.

Vacunas

Desde la SUP y la Dirección Departamental de Salud, “trabajamos mucho con la mesa de la primera infancia en medidas de mayor impacto, como la vacunación antigripal. En ese sentido, los sanduceros tenemos un buen porcentaje de cobertura”.
No obstante, “en un momento hubo que trabajar mucho, incluso con los pacientes pediátricos de riesgo. Pero eso no quiere decir que no tenga repercusión en los cuadros actuales, porque el virus sincicial no se cubre con la vacuna antigripal. Sino que, previo al invierno, es cuando más trabajamos con las vacunas para prevenir el virus de la gripe. No solo por la enfermedad, sino porque la gripe puede ser el punto de inicio de otra afección bacteriana que empieza con una gripe y termina con una neumonía”.

Venturino subrayó que “por eso hay que estar con el esquema de vacunaciones vigente. Hay que trabajar mucho en prevención para ayudar a que concurran a clase y no tengan que suspender su asistencia. Porque ahora no hay campaña, estamos en noviembre y esta vacunación empieza en otoño. En este caso, no estamos tan mal, sino que deberíamos estar mejor”.

Las respuesta a recibir las demás dosis “es buena, porque con la Departamental de Salud y a través de la mesa, coordinamos con los CAIF. La vacunación iba descendiendo, pero nos apoyamos con Primaria y no lo hacemos solo desde el consultorio. Las vacunas salvan vidas y hay un impacto clarísimo”.
Explicó que “nos pasó con la vacuna del neumococo. En Uruguay bajaron drásticamente los cuadros de neumonía. Es la representación objetiva de que las vacunas tienen un impacto positivo”.

Vacuna COVID

Consultado sobre la respuesta de la población pediátrica a la vacunación contra la COVID-19 y a la posibilidad de consecuencias ulteriores, Venturino resaltó que fue “todo positivo”. “Incluso hubo casos que se elevaron al Ministerio de Salud, pensando en reacciones posvacunales. Pero en Paysandú no tuvimos ninguna. Y a eso lo puedo decir porque hace poco, al hablar con la doctora Mónica Pujadas (presidenta de la SUP), vimos que hubo un seguimiento muy serio de los pacientes vacunados”.
El pediatra reconoció que “en otras partes del mundo se registraron estas reacciones, pero en Uruguay fue muy positivo. Acá no se presentó el síndrome inflamatorio mulsistémico, que era lo que ocurría a los niños luego de padecer COVID sin estar vacunados. En Paysandú tuvimos seis casos en el CTI, pero fueron antes que se resolviera iniciar la vacunación en niños. Posteriormente, no tuvimos estos cuadros en los niños vacunados y uno de los motivos era porque se veía un descenso en los casos de este síndrome, que cuando registra gravedad tiene afecciones cardiovasculares”.

Venturino recordó que “nuestro primer caso de este síndrome en Paysandú fue el tercero en el país y fue bastante movilizador para nosotros, que después tuvimos cinco casos más. Pero hoy, la vacunación contra la COVID tiene un alto porcentaje, se encontró una apertura en las familias porque, desde la Pediatría, la mayoría de las vacunas las administramos en la primera infancia”.
El médico consignó que “como todo lo desconocido, hubo desinformación y dudas. Pero ante la incertidumbre, los padres acudieron a los pediatras. Hubo un lineamiento claro del Ministerio de Salud, el GACH, las sociedades científicas y la UdelaR a través de la Facultad de Medicina. Fue un esfuerzo aunado por un bien común, que tuvo su impacto positivo”.
El pediatra concluyó que “cuando no son cuadros graves hay que evitar car en las puertas de las emergencias para no tener largas esperas. Un tratamiento sintomático en la casa o un mejor manejo de los tiempos ayuda a que no hayan altas cantidades de consultas”.