“La salud mental es la pandemia del siglo XXI”, dijo el precandidato a la Presidencia por el Partido Colorado Andrés Ojeda, quien estuvo en Paysandú en apoyo al lanzamiento de la lista departamental de Gino Belveder.
“Afecta a todos los demás temas, en particular la seguridad y el empleo”, destacó y agregó que “en lo referente al empleo, los números de certificados y atención médica por ansiedad, estrés y depresión son enormes. Lamentablemente, la salud mental no tiene el mismo grado de prioridad que otras dolencias. Que no sangre no quiere decir que no está enfermo, e incluso puede ser hasta más grave que alguien que sí esté sangrando”.
Andrés Ojeda propone “la creación de un mínimo de 25 unidades o centros de salud mental en todo el país. No son centros para el tratamiento de adicciones particularmente, porque creo que es un error reducir la cuestión de la salud mental solamente a las adicciones”.
“De hecho, si se logran algunas medidas potentes de prevención en salud mental, probablemente logremos evitar o prevenir algunas adicciones severas. Porque por lo general la adicción está antecedida por algún tipo de patología, estrés, ansiedad, o una depresión también. Tratar de impactar en lo previo puede llegar a evitar que alguna gente caiga en situaciones de consumo o suicidio, en su caso”, subrayó el precandidato a la Presidencia por el Partido Colorado.
“Por eso queremos que haya lugares donde la gente pueda ir en forma gratuita o muy barata, a atenderse con psicólogo y psiquiatra. Acceder hoy a un psicólogo significa esperar meses por una sesión en el sistema de salud o si se prefiere hacerlo de manera privada hay que pagar unos 2.000 pesos por semana por sesión. Prohibitivo para la mayoría de la gente”. “Es necesario universalizar el acceso a la salud mental”, indicó.
El costo de esos centros de atención de salud mental “sería de unos 6 millones de dólares. Pero hay que recordar que el Estado está poniendo 20 millones de dólares en el sistema de salud para este tema, y realmente no sabemos bien o no hemos visto cuál es el destino. Con 6 millones de dólares instalamos estos centros y empezamos a darle un camino a esto, que podrá ir creciendo en la medida que empiece a avanzar”.
Pero además Andrés Ojeda hizo hincapié en que dentro de la salud mental hay un sector de la sociedad que necesita especial apoyo “y es la policía”. En este “bloque de salud mental hay cosas macro, pero también hay cosas micro muy importantes. De hecho es algo que en su momento quisimos promover con el sindicato policial y no logramos instalarlo”.
Ojeda planea “una aplicación de teléfono en la cual el policía tocando un botón de pánico pueda acceder a ayuda rápidamente, durante las 24 horas, porque rápido es que lo necesita. Tiene que ver con la salud mental pero también con prevenir el suicidio. Ese sistema aseguraría anonimato con el Ministerio del Interior. Creo que así se aumentaría grandemente la cantidad de consultas, sobre todo en momentos complicados. Después tener un seguimiento para esos policías, siempre por fuera del ministerio, de modo que no acarree consecuencias como el retiro de armas”.