Estudiante de la Escuela Agraria fue golpeada en el rostro por otra alumna

Una adolescente de 16 años resultó con importantes lesiones en el rostro, que incluso podrían comprometer un ojo, al ser agredida por otra de su misma edad en la Escuela Agraria de Lorenzo Geyres. Si bien el hecho ocurrió en la noche del pasado 24 de octubre, la madre de la víctima manifestó su malestar ante la resolución que adoptó la institución, al sacar del régimen de internado a su hija “y a la que la atacó dejarla ir como si nada”. A raíz de ello, además, la mujer presentó la denuncia penal, por lo que se dispuso una serie de medidas para la agresora por el plazo de 180 días.

De acuerdo a lo manifestado por la señora a EL TELEGRAFO, “me llamó una compañera de mi hija a las 22.30 diciéndome que la habían agredido, que estaba sangrando en la cabeza. Inmediatamente llamé al director de la Escuela Agraria y le comenté lo que había pasado, él no sabía nada porque estaba en el gimnasio y me dijo que llamaría a la escuela. Él se fue para allá y trajo a mi hija a emergencias de Comepa, donde le diagnosticaron que tenía un corte en el ojo, entre otras lesiones, y le dieron el alta a las horas”.

Asimismo, dijo que la Escuela Agraria “no ha determinado ni una medida contra la agresora, no llegaron ni a conversar con ella sobre lo que había pasado. Yo tuve que ir por la vía legal, denunciar y poner un abogado. En la audiencia que hubo primero en Quebracho se determinaron medidas de prohibición de relacionamiento de la agresora con mi hija, pero fuera del predio de la Escuela Agraria, no se puede acercar ni tener ningún tipo de comunicación”.

“Esto llevó a que en la escuela suspendieron a mi hija del régimen de internado, que ambas tenían de lunes a viernes, pero no hicieron más nada con la situación. La agresora sigue yendo a la Escuela Agraria, sigue insultando a mi hija y esto no para. La Dirección determinó sí sacar a otros alumnos que según ellos tenían problemas de conducta, que fueron quienes salieron en defensa de mi hija porque se armó una batalla campal, pero a la chiquilina agresora que golpeó y lastimó brutalmente a mi hija no le han hecho nada”, comentó indignada.

La señora desea “que la Dirección se ponga las pilas y realmente tomen medidas como docentes, porque si no, parece que nos les importa lo que está sucediendo ahí adentro”.

LE PEGÓ FRENTE A UNA FUNCIONARIA

EL TELEGRAFO accedió al acta de la audiencia realizada en el Juzgado de Paz de Quebracho el 28 de octubre, donde se narra que –según la denuncia de su madre a la Policía– la víctima “estaba hablando con la encargada de la institución y una amiga (también estudiante), momento en que la otra jovencita se acerca y sin mediar palabra la agrede físicamente, desconociendo el motivo”. Y manifestó también que la agresora “en reiteradas ocasiones insulta y ha tenido problemas con varios compañeros”.

En tanto, al comparecer en la audiencia, la denunciante agregó a lo mencionado que su hija no era atacada por la otra joven solo en la Escuela Agraria “sino también en festivales”. Manifestó que quiere que su hija “estudie tranquila” y pidió medidas para protegerla. Comentó que a raíz de la agresión, la menor “se desmayó por el dolor de cabeza, la mandaron al cardiólogo y al oculista”, porque no ve del ojo derecho donde fue golpeada.

También se le tomó declaración a la funcionaria de la escuela que estaba conversando con la menor, quien brindó similar versión aunque dijo que la agresora le reprochó a la otra jovencita que dejara de decir que su novio era “un guampudo”.

En la audiencia también se le tomó declaración a la madre de la menor agresora, que comentó que se enteró del hecho porque su hija “la llamó llorando (diciéndole) que se había peleado y no quería hacerlo”.

Por su parte, la audiencia celebrada en nuestra ciudad el pasado 4 de noviembre, el juez letrado actuante resolvió que se mantengan las medidas de prohibición de relacionamiento de ambas, “salvo cuando se encuentren en la Escuela Agraria, donde la institución deberá adoptar las medidas idóneas y pertinentes para evitar que se susciten agresiones”; que la situación sea derivada a INAU a efectos del “abordaje y ofrecer a través de sus equipos técnicos las distintas posibilidades de protección de la adolescente”.

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