Juez federal de Concepción del Uruguay murió al caer de un décimo piso

La trágica muerte del juez federal Pablo Andrés Seró causa conmoción en Concepción del Uruguay. El magistrado, de 55 años, cayó al vacío desde un edificio ubicado en el centro de la ciudad entrerriana al que había ido a ver a su madre. Las primeras pericias apuntan a que el juez se habría quitado la vida y que no habría habido intervención de terceros, según indicaron medios locales. De todas formas, los investigadores no descartan otras hipótesis, como la posibilidad de un accidente.
El hecho ocurrió en la mañana de la víspera en la esquina de las calles Galarza y Eva Perón, donde se ubica el edificio Antares. El cuerpo del magistrado fue encontrado junto a un auto estacionado. En la investigación trabaja personal de la Policía de Entre Ríos y de la División de Criminalística, bajo las órdenes de la fiscal María Occhi.
El juez federal Pablo Seró, murió este jueves tras caer de la terraza de un edificio de diez pisos, ubicado en el centro de la ciudad de Concepción del Uruguay, según pudo saber EntreRíosYA. Las circunstancias del trágico hecho son investigadas por estas horas, pero los indicios apuntan a una posible autodeterminación del magistrado.
En tal sentido, el jefe departamental de Policía, comisario Darío Allegrini, contó que “el llamado sobre una persona sin vida en la vereda, lo recibimos a las 10 de este jueves y al llegar al lugar, se estableció que se trataba del juez federal, Pablo Seró.
Asimismo, Allegrini confirmó que el magistrado, “ingresó al edificio, habló con el portero, a quien le pidió ir hasta la terraza y desde ese lugar, se habría arrojado al vacío”.
Las primeras pericias apuntan a que el juez se habría quitado la vida y que no habría habido intervención de terceros.
De todas formas, los investigadores no descartan otras hipótesis, como la posibilidad de un accidente. “Se realizaron pericias y la fiscal, junto al personal de Criminalística trabajaron en el lugar y luego, se trasladaron a la oficina del doctor Seró en el Juzgado Federal, para realizar un análisis de esa dependencia judicial, y ver si pueden hallar alguna evidencia para esclarecer el hecho”, sostuvo Allegrini.
Por otra parte, el comisario explicó que antes del trágico hecho, el juez Seró se presentó en su despacho y “también participó de una audiencia en el Juzgado Federal y luego se dirigió hasta el lugar donde ocurrió el incidente”, dijo.

A CARGO DE CAUSAS IMPORTANTES

De acuerdo a la recopilación de Clarín, Seró tuvo a su cargo la causa de los vuelos de la muerte en el Delta de Entre Ríos y el secuestro y tortura de un grupo de dirigentes del Partido Comunista de Concepción del Uruguay. Además llevó adelante gran cantidad de causas vinculadas al lavado de activos y el narcotráfico.
Participó en la investigación de un secuestro en el que se vincula a la temible banda narco de Rosario, Los Monos. La víctima fue el empresario Gastón Tallone, un hombre relacionado con el negocio portuario y con fuertes vínculos con el Puerto de Concepción de Uruguay, que fue raptado en julio de 2024 en el barrio de Abasto. Su familia pagó un rescate de 65.000 dólares, pero nunca lo volvieron a ver. La principal hipótesis es que Tallone se quedó con casi media tonelada de cocaína de un grupo criminal brasilero con contactos en Rosario.
Por este caso incluso están siendo investigados también barrabravas de Newell’s y a la familia le hicieron llegar el mensaje “con la mafia no se jode”.
Por esta causa, en diciembre fue detenido Gustavo Juliá, quien gozaba del poder que le daba ser el hijo del Brigadier Antonio Juliá, jefe del Estado Mayor Conjunto durante el gobierno de Carlos Menem.
En 2022, en tanto, había instruido la investigación del caso del misterioso iraní Keifi Mojtaba, quien fue detenido en Concepción del Uruguay con un DNI robado. El hombre, que apenas podía comunicarse en español se acercó a la boletería de La Histórica, la terminal de ómnibus de Concepción, en Entre Ríos. Intentaba comprar un tique para cruzar la frontera hacia Paysandú, pero la empleada se dio cuenta que la documentación era falsa y llamó a la Policía. Su detención armó un fuerte revuelo, porque coincidió en tiempo con la llegada a Córdoba de un avión de la compañía venezolana Emtrasur, que luego quedó retenido en Ezeiza.
En ese caso, el juez federal Pablo Seró detectó que en Buenos Aires el iraní apareció contactando a un local llamado “Metales Pipi” para llevar latas de aluminio vacías para reciclar y que usaba el nombre de Francisco Azad primero, y también el de Asan Azad. El hombre de su documento al momento de querer comprar el tique dijo que le habían robado la billetera. O sea, el iraní falsificó su identidad con un documento robado.