Arbeleche habló de “mejora” en resultado fiscal; senador cuestionó “si números están bien, ¿por qué perdieron?”

(el observador-montevideo portal)
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) presentó un informe sobre la situación fiscal de Uruguay al cierre del período de gobierno. Esa instancia pública que se realizó por quinto año consecutivo está prevista dentro de la nueva institucionalidad fiscal vigente desde 2020.
La mayor parte de la presentación, que duró unos 40 minutos, se concentró en la política fiscal del último año y del quinquenio en su conjunto, donde la ministra Azucena Arbeleche volvió a comparar en detalle con el anterior gobierno del Frente Amplio.
El primer punto abordado fue el resultado fiscal efectivo del Gobierno Central y el Banco de Previsión Social que en 2024 terminó con un rojo de -3,4% del Producto Bruto Interno (PBI), tres décimas por encima de lo proyectado en la última Rendición de Cuentas (-3,1% del PBI).

Sobre esto, Arbeleche señaló que el desvío entre lo que se había programado y el resultado alcanzado se explica “en su totalidad” por la caída de ingresos. El año pasado, mientras los gastos se mantuvieron “alineados” con la última presupuestación, los ingresos por recaudación de impuestos cayeron en 0,7% del PBI (U$S 730 millones) respecto a lo estimado para el ejercicio. Esto, debido a lo que denominan la “sorpresa inflacionaria”, es decir una caída de la inflación “más acelerada de lo esperado” por el equipo económico y los analistas.
La ministra añadió que si bien la recaudación bajó en U$S 730 millones, en parte, eso fue compensado por una mejora en las utilidades “genuinas” de las empresas públicas. “No se pidió ningún adelanto de utilidades, a estas empresas les fue mejor y volcaron más utilidades a las arcas del gobierno central”, argumentó.
Ese punto había generado un cruce con el gobierno entrante días atrás, y en particular con el economista Mario Bergara, que había manejado cifras equivocadas sobre el tema, según él mismo reconoció. En otra parte de su presentación, Arbeleche comparó los resultados finales del quinquenio con los registrados al cierre de 2019 durante el anterior gobierno del Frente Amplio.
La comparación realizada muestra que el déficit fiscal estructural de 2024 (-3,7% del PBI) fue menor al registro de 2019 (-4,5% del PBI). Esa diferencia de 0,8 puntos porcentuales equivale a “una mejora” de U$S 600 millones, según los resultados hechos públicos por el MEF.

Al cotejar el déficit fiscal efectivo al cierre del año pasado, el resultado de -3,4% del PBI se ubicó por debajo del -3,9% del PBI de 2019, lo que equivale a U$S 400 millones de “mejora”, dijo la ministra.
“Mida como se mida, el resultado fiscal en 2024 es menor a lo que había en 2019. Si se dice otra cosa, el análisis está equivocado. Todos los números son públicos”, dijo Arbeleche. Agregó que “tal como se está dejando la administración, no es necesario hacer un ajuste fiscal en 2025. No es necesario subir impuestos. La decisión de hacerlo o no es del próximo gobierno”, afirmó la ministra.
Sebastián Sabini, senador del Movimiento de Participación Popular (MPP) del Frente Amplio (FA), criticó la presentación de los resultados fiscales. “Yo me pregunto, si los números de la economía están tan bien, ¿por qué perdieron? ¿Por los escándalos de corrupción? ¿Porque los frenteamplistas somos malos y mentimos?”, cuestionó.
“Es difícil que un gobierno pierda con la economía andando. Se puede recortar la realidad, pero no taparla”, agregó. El senador, que renovó su banca para la nueva legislatura, aseguró que “este fue un período en donde se produjo una pérdida importante de salario real y al final una recuperación”, lo cual “pasa factura y hay varios ejemplos en la historia”. Asimismo, afirmó que “creció la desigualdad. Hubo crecimiento económico, pero no se distribuyó en forma equilibrada”.

PICO HISTÓRICO

(SUBRAYADO)
En medio de la ola de calor, UTE registró un nuevo pico histórico de consumo de energía eléctrica que ocurrió a las 15.25 horas del lunes con 2.365 megavatios. El último censo nacional arroja que el 50% de los hogares uruguayos cuenta con aire acondicionado. El año pasado, en el marco del Plan 2024 de eficiencia energética, se sumaron 61.000 equipos adicionales.
El anterior, se dio justo siete días antes con un consumo de 2.300 megavatios de potencia.
Para cubrir la demanda, se pusieron a disposición todas las fuentes de generación eléctrica, como la hidráulica con la que se abastece más de la mitad del consumo, pero también se recurre a la importación desde Brasil, porque es más barato que prender las centrales térmicas uruguayas, indicó la presidenta de UTE, Silvia Emaldi. Agregó que el consumo de energía eléctrica crece año a año en el país, también la generación y la exportación. El año pasado se vendieron 133 millones de dólares en energía a Argentina y Brasil.