
Con el inicio del Torneo de Honor de Primera División del fútbol sanducero de la temporada 2025 a la vuelta de la esquina, Bella Vista se perfila como uno de los equipos con mayores aspiraciones. Sin participación a nivel nacional este año, la institución papal ha volcado todas sus miradas al campeonato local con el firme propósito de regresar a los primeros planos.
Al frente del plantel estará nuevamente Christian Murieda, entrenador de la casa, quien en diálogo con EL TELEGRAFO realizó un balance de los preparativos en busca de la Copa número 15, con la ambición de convertirse en el máximo ganador del fútbol sanducero a nivel local.
“Este año comenzamos los entrenamientos en marzo, con casi todo el plantel, y luego se fueron sumando los muchachos que venían de la selección. Tenemos una base sólida de la temporada pasada, con algunas ausencias puntuales, pero en su mayoría, contamos con un grupo compuesto por jugadores del club. Como siempre, seguimos apostando al semillero de Bella Vista, que es nuestra identidad. Si bien siempre incorporamos alguna figura o jugador destacado pero el enfoque está en el trabajo que venimos realizando en las formativas desde 2018, que ha dado muy buenos frutos. En todas las divisiones se han formado jugadores, que en su momento nutren al primer equipo y, en algunos casos, siguen su carrera en otros clubes. La fábrica de talentos jóvenes sigue funcionando y la apuesta del club que en ese aspecto no se agota nunca ”, explicó el DT.
Sobre las incorporaciones, Murieda añadió que “sumamos a Matías Píriz, Ruben Carlis y Cristian Sueldo. Además, estamos a la espera de la posible llegada de algún futbolista más en sectores clave, si se presenta la oportunidad. La preparación viene siendo muy buena; ya dejamos atrás la pretemporada y ahora estamos en la etapa del fútbol, trabajando en lo técnico- táctico”. También confirmó que su ayudante técnico será Anthony Callero.
El objetivo del título y el crecimiento institucional
A pesar de no compartir plenamente el nuevo formato del campeonato local, el entrenador fue claro en sus metas: “Como todos los años, vamos a pelear en lo más alto, es algo característico de Bella Vista. Siempre vamos por el título, sin perder de vista nuestra línea de trabajo: formar jugadores desde los valores que promovemos como institución, tales como perseverancia, respeto, humildad y muchas ganas. También apostamos a crecer como personas y como grupo, con aquellos que realmente tienen el deseo de estar y aportar desde donde toque”.
Murieda también se refirió a la ausencia del conjunto papal en la Copa Nacional de Clubes: “Este año no participamos en la Copa OFI porque el club decidió priorizar la inversión en la construcción de una cancha sintética, utilizando los recursos que normalmente se destinaban a la copa, además de algunos ingresos extras. Es fundamental que el club siga creciendo en lo estructural como en lo económico, que también es un factor importante”.
Casa auriblanca
“Estoy muy contento de que Bella Vista me haya dado la oportunidad de seguir, tanto en inferiores como en Primera. Estoy en el lugar donde quiero estar, en el club del cual soy hincha, en el lugar donde mi familia está cómoda, y yo también. Ese es un aspecto fundamental para poder trabajar tranquilo y aspirar a grandes logros”, concluyó.