Dos pequeñas de 4 y 9 años sufrieron anoche el embate de la inseguridad cuando desconocidos les arrebataron un celular. Las niñas estaban a metros de adultos, que atendían el comercio familiar de comidas en la zona de Ituzaingó y Zorrilla de San Martín. Con una mezcla de rabia, impotencia y susto por lo que ocurrió, la madre de la más chiquita se comunicó con EL TELEGRAFO y relató la tensa situación. “No digan nada o nos vamos a enojar” le dijo una pareja compuesta por una mujer y un hombre a las pequeñas que estaban en el escalón del comercio de comidas “Paprika”, donde las apretaron para que les dieran el celular con el que miraban videos.
“Tenemos el local de comidas hace quince días y justito mi nena salió al escaloncito de la entrada con una amiguita a mirar videos con el celular. Yo estaba trabajando adentro en la cocina y justo su papá, que está en la atención, se acercó donde estaba. Nosotros no pudimos ver nada, pero sí escuchamos el griterío de las nenas. A la nena de 9 años le pegaron y las amenazaron a las dos diciéndoles que no dijeran nada.
Quedaron en estado de shock. Cuando nos asomamos a la calle vimos a un hombre con campera corriendo, pero gente que estaba en la cuadra nos aportaron el dato de que era una pareja y los dos agarraron por Ituzaingó al oeste”, comentó. Con la voz entrecortada, la mamá de la pequeña dijo que fue un celular “pero mañana igual me la llevan o la lastiman en cuestión de segundos, porque no fue más que eso”. Las niñas “estaban en el escalón del local, no andaban corriendo lejos de nosotros. Sentimos una impotencia tan grande porque verlas llorar y conmocionadas por lo que les pasó, la más chiquita sin casi entender qué, es horrible”, indicó la joven madre.
