Calapis se reconvirtió y hoy ofrece a los apicultores de todo el país el servicio de su sala de extracción de miel

Cuando muchas empresas procuran reconvertirse o aggionarse a los cambios que se producen en el mundo, la Cooperativa Agropecuaria de Responsabilidad Limitada de Apicultores Sanduceros (Calapis) varió el rumbo de su accionar, y luego de algunos años de captar y comercializar la producción de sus socios, ahora dejó esta decisión en mano de cada apicultor. Y, tras acceder a un crédito proveniente del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP), preparó las instalaciones de su sala de extracción de miel, para brindar un servicio a los apicultores uruguayos.
“Esto surgió con el trabajo que venía desarrollando la directiva anterior, que presentó un proyecto al MGAP, desde donde surgieron fondos para la refacción de la planta de extracción de miel”, explicaron a EL TELEGRAFO, los integrantes de la cooperativa sanducera, Omar Bonilla, Felipe Ortiz y Gonzalo Fernández. “Calapis se reconvirtió y ya no exporta miel como lo hacía hace algunos años atrás. Hoy vive especialmente de los servicios que brinda”, manifestaron, al tiempo que aclararon que el productor “le vende su producción al exportador que le parezca”.

BUEN AÑO
Por su parte, Gonzalo Fernández señaló que “estamos cerrando un año que en lo productivo fue muy bueno, con las colmenas todas en buen estado en cuanto a la sanidad, y ya pensando en la próxima primavera”. Agregó que “estamos muy conformes con el factor clima, que es preponderante para nuestra producción”, al tiempo que finalizó explicando que la sala “está abierta para todos los apicultores en general, que estén interesados en utilizar los servicios”.

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