Nueva presidenta de Cruz Roja uruguaya se reunió con directivos locales y presentó plan de trabajo

En octubre de 2017, asumieron las nuevas autoridades de la Cruz Roja uruguaya, que encabeza Ximena Pardo. El cambio tuvo lugar tras el desplazamiento de la directiva anterior a raíz de una intervención efectuada por el Ministerio de Educación y Cultura, que confirmó la denuncia por elecciones irregulares, falta de transparencia en el manejo de los fondos y dudas con respecto al destino de las donaciones para los damificados del tornado de Dolores y las inundaciones en Durazno, presentadas por un grupo de voluntarios a fines de 2015.
El Ministerio presentó un informe parcial en abril pasado y solicitó una prórroga para continuar la intervención por otros seis meses, donde detectó que los estatutos no estaban vigentes, las irregularidades de las elecciones anteriores, además de la ausencia de un plan de acción y balances al cierre del ejercicio. Pardo integró el grupo de denunciantes y, con la habilitación de un nuevo período de elecciones al finalizar la intervención, resultó electa para estar al frente de la Cruz Roja.
REUNIONES EN PAYSANDÚ
La nueva dirigente se reunió el domingo con los referentes locales y el lunes con la comisión del Instituto Canadá de Rehabilitación. “La propuesta del consejo nacional de gobierno es que trabajemos con sesiones en las diferentes filiales para tomar contacto con las realidades de las comunidades, que son los brazos operativos de las comunidades y para acercar la realidad nacional. Además, los consejeros son todos del Interior y eso justifica aún más las visitas a las filiales”, dijo Pardo a EL TELEGRAFO.
La presidenta reconoció que a nivel institucional “hay mucho para hacer, sobre todo porque hay dos años de inoperatividad desde la sede central, porque las filiales continuaron con su trabajo. A nivel central, no se encuentra habilitada la Escuela de Enfermería y tampoco hay servicios habilitados, por ende, todas las acciones desde la sede se encuentran paralizadas”. En los últimos tres meses de asunción del nuevo equipo, “la idea es reencaminar la institución, profesionalizar nuestros servicios y tender al manejo que hace la Cruz Roja a nivel mundial, con mucho enfoque en las personas y dignificar su situación”.

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