Desde los barriles de aluminio a las dos enormes barras con 25 canillas chopperas cada una, ofreciendo más de 40 variedades de cerveza artesanal, ciertamente han pasado décadas en la Semana de la Cerveza. No solamente este año la gran atracción es que por primera vez en la historia de la fiesta cervecera por excelencia de la región dentro del predio se comercializa exclusivamente cerveza artesanal (Bimba Bruder de Paysandú, Cabesas Bier de Tacuarembó, Volcánica de Canelones, Dharma de Fray Bentos, y Barbot de Colonia), sino también la fuerte inversión que se aprecia para que la variedad de tipos llegue en óptimas condiciones a cada paladar.
Las barras fueron “diseñadas por nosotros, aunque eso no quiere decir que inventamos nada. Pero en Uruguay nunca habíamos visto algo así. Es la barra, con las chopperas y detrás una cámara de frío, donde están los barriles de cerveza. Hay también un motor que hace circular agua helada en la cañería, para que no se calienten los caños cuando la cerveza es tirada. Sale fría, muy bien”, dijo Carlos Lamarca, de Bimba Bruder.
Al referirse a la experiencia del consumidor, dijo Lamarca que “probablemente cuando ve el pizarrón con 25 títulos no sepa qué pedir. Pero no es tan difícil. Hay que pensar qué se quiere tomar. Si una rubia, si negra, y ahí el vendedor empieza a guiarlo. Le va indicando cuáles son las más suaves, las más amargas o dulzonas. De esa manera se hace bastante sencilla la selección. Y también entretenida”.
Lamarca aseguró que “sin cerveza no nos vamos a quedar”, aun cuando se trata de cervecerías artesanales porque “cuando decidimos presentarnos al llamado, nos aseguramos tener en stock la cantidad de litros que la Semana demanda. Estamos con existencias por encima de los promedios históricos de venta anual”. Por otra parte, el precio es accesible. El vaso tiene un costo de 70 pesos en el caso de las rubias, “pues las bonificamos. Su valor es de 90 pesos el vaso, pero las pusimos a 70 como una forma de agradecimiento a la confianza recibida por la gente”, indicó.
Hasta ahora, “todo ha funcionado muy bien, de acuerdo a lo planificado. Es nuestra primera fiesta (de la cerveza) y tuvimos que planificar todo el movimiento logístico y de funcionamiento interno así como de control. Todo está muy bien y la gente se arrima a nuestras barras”, subrayó Carlos Lamarca.
