Solicitada

AGUA: DERECHO FUNDAMENTAL… PERO NO PARA TODOS
Lamentablemente, así debemos titular esta solicitada, que hace referencia al suministro de agua potable a los asentamientos que se ubican alrededor del vertedero municipal. El problema es grave, porque muchas familias suelen pasar hasta dos o tres días sin agua debido a la espera de que les toque el turno de ser abastecidos.
Sucede que el camión comienza el reparto el martes, pero no entrega a todas las familias, comienza con algunas, mientras que el resto que vació y limpió sus recipientes queda a la espera, lo que significa que transcurran los días y sea imposible cocinar e higienizar a los niños para ir a la escuela. Eso sucede porque dicho abastecimiento está desorganizado, pues no existe un cronograma que indique a cuáles familias va el martes, a cuáles va el miércoles y así sucesivamente.
Otro problema es el traslado de dicha agua, que se hace en camiones viejos a los que se les rompen rápidamente las bombas e implica que, de tres, en realidad funcione uno que es remendado y nuevamente se vuelve a romper. Esto dificulta aún más la logística en este sentido. Asimismo, está en duda la higiene de esa agua, porque cuando es entregada a las familias, en algunas ocasiones está turbia.
Quien tiene agua potable diariamente cocina sin tener que hervirla ni colarla. En cambio, estos vecinos deben lavar el recipiente con hipoclorito, pero además deben colarla y hervirla luego de dos días porque tiene larvas. Sería importante que en vez de trasladarla desde OSE Paysandú, sea extraída de la UPA que se ubica en Casa Blanca, para un rápido abastecimiento.
En casos extremos, una y otra vez, estas edilas se han puesto en comunicación con el director general de Servicios, quien en forma inmediata da la orden de entregar agua a esas personas. Pero la situación no se arregla. Todas las semanas es un calvario para esos habitantes. No es suficiente, ya que la entrega es semanal. Es impensable que no cuenten con un servicio tan esencial como el agua potable.
Parece que para este gobierno existen ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda. Y en ese caso, a los de segunda se los asiste peor que a los animales. El acceso al agua potable es un derecho humano esencial consagrado en nuestra Constitución, pero como lo político vale por encima de lo jurídico, no existe el mínimo respeto a la vida del ser humano.
Damos a conocer este hecho porque la inoperancia de la gestión hace que muchas familias no cuenten con agua por algunos días siendo que el asunto es de fácil solución: o abastecen a todos el día martes o arman un cronograma en donde se explicita qué día le toca a cada familia. Se han tocado todas las puertas, pero nadie del Ejecutivo es capaz de solucionar algo tan sencillo. ¿Será que nuestro intendente tomará medidas? Por ahora, prima la desidia.
Guadalupe Caballero
Gabriela Gómez
Indarte
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