El comerciante Alberto Severo, conocido por estar al frente de su negocio del rubro pizzería en la zona norte de la ciudad fue abordado por un sujeto que lo golpeó con un revólver y efectuó un disparo con arma de fuego, en un aparente intento de rapiña, en la noche del viernes.
De acuerdo con el relato de “Veto” a EL TELEGRAFO, se dirigía hacia su finca cuando fue sorprendido por un joven que simuló estar accidentado. “Iba manejando la camioneta por Calle 28, la de Cams, hacia el Este, y al llegar al kilómetro 11 de la ruta 90, había una moto tirada en el piso y un loco que se estaba medio sacudiendo, como que se había caído. Paré y le pregunté si precisaba algo y me dijo: ‘no, ya vienen’. Se ve que había otro que no estaba en la calle, capaz metido en los yuyos, y me pegó un culatazo con el revólver. Cuando me pegó, disparó un tiro al lado de mi cara, le erró a mi cabeza, y dio en el parabrisas delantero de la camioneta. Intenté manotearle la mano para sacarle el arma y que no me diera otro”, contó el comerciante.
En ese momento, Severo soltó el volante de la camioneta, que continuó la marcha hacia adelante, “y se dio contra un cerco y ahí el loco se cayó en la cuneta. Abrí la puerta y me le tiré arriba. Empezamos a luchar y ahí pude zafar después. Fue horrible (la situación)”, narró.
“El seguía con el arma, no se la pude sacar. Cuando quedó con la cabeza medio abajo de la camioneta y la mano con el arma también, aproveché a cruzar el cerco y meterme para una chacra para disparar”. Después, mientras Severo se resguardaba y daba cuenta de lo ocurrido al 911, el malviviente aprovechó para hurgar en las pertenencias que éste llevaba en la camioneta. “Abrió la gaveta y revolvió un poco en los papeles que tenía pero no me robó nada”, comentó.
“Se fueron los dos en la moto; el otro no intentó hacer nada, solo lo esperó a éste con la moto prendida. Hacen eso ahora, como que están caídos para que uno los auxilie”, agregó.
En tanto, consultado sobre si el hecho fue el azar o no, Severo dijo que cree que lo iban siguiendo para robarle. “Porque pasaron otros vecinos un ratito antes, y se ve que estaban dentro del cerco, porque no los vieron. Tendrían que haberle hecho lo mismo al vecino. Actuaron con casco protector colocado. Fue un momento muy difícil. Enseguida pasó un vecino y me acompañó hasta que vino la Policía. Me llevaron al hospital, donde me atendieron por la herida”, indicó. El caso está en la órbita de la Unidad de Investigaciones.