Un hombre de 42 años que amenazó de muerte a una mujer apuntándole con un arma de fuego, terminó siendo sentenciado a siete meses de prisión, aunque se le permutó por “libertad vigilada” con el uso de una tobillera electrónica, cumpliendo cuatro condiciones que le impuso el juez.
Todo comenzó cuando en la central del 911 se recibió la denuncia de una mujer que estaba siendo sometida a violencia doméstica en las inmediaciones de la Costanera Norte y Antonio Estefanell. El Centro de Comando Unificado Departamental (CCUD) envió personal policial al lugar, y al llegar los efectivos de la Comisaría Departamental Segunda y de la Unidad de respuesta Policial (URP) vieron a una mujer que caminaba en estado de nervios y pidiendo ayuda. Ya con los policías a su lado, les informó que su pareja la había amenazado de muerte con un arma de fuego, y que estaba cerca del lugar a bordo de una camioneta Chevrolet S10.
LA LLAMÓ PARA CHARLAR
Ya más tranquila, la mujer de 44 años fue identificada y en la denuncia estableció que encontrándose en su lugar de trabajo, recibió una llamada telefónica del denunciado solicitándole que saliera con él en la camioneta para conversar. Sin embargo, al llegar a la zona cercana al río, según la denunciante, comenzó a insultarla con todo tipo de agravios, la tomó de los cabellos y le apuntó con un arma de fuego, amenazándola de muerte. Pese a la situación, la mujer logró salir del vehículo, y llamó al 911 para pocos minutos después encontrar al patrullero de la Policía.
Los efectivos buscaron y encontraron cerca la camioneta, que era conducida por un hombre de 42 años y en el interior del vehículo encontraron en el asiento del acompañante una pistola marca Bersa sin cargador calibre .22 con funda de cuero color negro, y dentro de una mochila había un cargador con 6 municiones y un celular, una agenda con tapa de cuero y una pistola de aire comprimido marca Powerline 415 con balines, todo lo que quedó en depósito en la unidad policial.
RECONOCIÓ LA DISCUSIÓN
El hombre denunciado fue identificado por la Policía, e interrogado dijo que había mantenido una discusión con su pareja, reconociendo que tenía en el rodado un arma de fuego y una de aire comprimido. Del hecho se enteró a la Justicia de Familia, haciéndose cargo del procedimiento personal de la Unidad Especializada en Violencia Doméstica. Por disposición judicial se instrumentaron medidas cautelares en esa oportunidad y las actuaciones prosiguieron.
El pasado 12 de abril, la sede actuante aplicó el Decreto 1885/2018 para el denunciado, estableciéndose que atento a lo que resulta del parte policial, declaración de la denunciante y del denunciado, habiéndose probado prima facie la legitimación de la denunciante, la verosimilitud de los hechos denunciados y atento a lo solicitado por la parte y el Ministerio Público, y lo establecido en la ley 17.514 y artículos 313, 314 y 315 del Código General del Proceso (CGP), se resolvió ordenar a la autoridad policial correspondiente la colocación del dispositivo de monitoreo electrónico (tobillera) por el plazo de 180 días, con un radio de exclusión de 600 metros y prohibiéndose cualquier tipo de comunicación y por cualquier medio, por el mismo plazo.
SENTENCIADO A SIETE MESES
Por disposición judicial, se resolvió el jueves la formalización de la investigación y posterior juicio abreviado del hombre de 42 años por un delito de violencia doméstica especialmente agravada en concurrencia formal con un delito de violencia privada especialmente agravada y en reiteración real con un delito de tenencia no autorizada de arma de fuego a la pena de siete meses de prisión que cumplirá bajo el régimen de libertad vigilada bajo cuatro condiciones: residir en un lugar donde sea posible la supervisión por la Oficina de Supervisión de Libertad Asistida (OSLA) dejando constancia del domicilio; sujetarse a la orientación y vigilancia pertenecientes de esa oficina; trabajar en el ejercicio de una profesión, oficio, empleo, arte, industria y comercio bajo la modalidad que se determinen en el plan de intervención; y presentarse una vez por semana en la seccional policial correspondiente al domicilio fijado.