Bancada del Partido Nacional solicita rápida decisión por ordenamiento territorial o podría hacer uso de su mayoría

En verdad, el mismo comienzo amigable de cada mes. Pero no todo el plenario se desarrolló en el mismo tono. Se apreció como Falero conducía la sesión sin levantar el pie del acelerador. Aun cuando había temas claves, como el presentado por Yamandú Orsi, de Canelones, para buscar la recuperación de activos en otros tributos que cobra la intendencia, especialmente el inmobiliario.
Ni siquiera hubo informe de la comisión del Sucive porque el documento no estaba en la Mesa cuando debía considerarse. Pie a fondo, aunque no se podía aun comprender la razón.
Así Falero llegó al “Varios” siempre tan temido, porque allí se consideran los temas más complejos, los que no aparecen en el temario, pero que forman parte de las preocupaciones de los intendentes.
Falero arremetió contra la forma en que en el Senado se considera la modificación a la ley de ordenamiento territorial. “Hace un año que estamos pidiendo que se nos considere, que se nos convoque, que se nos escuche, porque como lo hemos dicho aquí más de una vez, hay claros ataques a la autonomía departamental”, indicó el Presidente del Congreso.
Detalló lo actuado hasta el momento, incluyendo el envío por el Poder Ejecutivo de algunas modificaciones que “supuestamente” contemplaban las demandas de los jefes departamentales.
Pero “no es así, es un documento muy corto que en realidad no llega al fondo del asunto”. Ante esto, el Congreso mandató a una comisión de expertos a que hiciera un proyecto alternativo a la ley para ser elevado al Senado “de manera urgente, los tiempos apremian, ya algunas intendencias están sufriendo los efectos perjudiciales de este marco legal”. Solo hacían uso de la palabra intendentes del Partido Nacional en la discusión, entre ellos Carmelo Vidalín de Durazno y Carlos Moreira de Colonia. Fue entonces cuando Falero empezó a hablar en nombre “de la bancada del Partido Nacional” y sostuvo que “los intendentes del Frente Amplio no han participado en la discusión, ni han concurrido al Parlamento cuando sí lo hicimos nosotros”.
El documento modificativo propuesto por la comisión nombrada por el Congreso fue repartido durante la sesión y Falero pidió “por favor considerarlo con urgencia y en el plenario que viene a tomar decisión”. Por primera vez en mucho tiempo, de manera explícita, se manejó la posibilidad de tomar una decisión ya no por consenso sino por mayoría. Y tal consideración vino de parte del propio presidente del Congreso.
“Tenemos tres alternativas: una es enviar un proyecto alternativo con la aprobación de todas las intendencias. Otra es utilizar otro mecanismo de aprobación (aludiendo a la mayoría que ostenta la bancada del Partido Nacional). Y otra es dejar en libertad de acción a todas las intendencias para que aquellas que lo consideren interpongan un recurso de inconstitucionalidad, que como se sabe es independiente”.
Los intendentes del Frente Amplio se mantuvieron en silencio, aun cuando se los vio conversar a Daniel Martínez (Montevideo), Caraballo, Aníbal Pereyra (Rocha) y en menor medida Oscar Terzaghi. Lo hicieron mientras la sesión seguía adelante y mientras sus pares blancos criticaban con dureza al gobierno por no “respetar a las intendencias”.
No pasó de un conato de revolución en la granja, pero quedó claro que una vez más el consenso mantenido por el Congreso se pone en riesgo. En los últimos tiempos se ha mantenido por las negociaciones entre bancadas, discutiendo hasta alcanzar un acuerdo para recién entonces presentar el tema en el plenario.

(Más información en edición impresa)