“Estábamos al tanto del asunto, teníamos el control del proceso”, aseguró el intendente Caraballo

“Nos nos estábamos comiendo los mocos, muchachos”, dijo gráficamente el intendente Guillermo Caraballo en un encuentro con la prensa sanducera en la sala José Acquistapace del Palacio Municipal, para confirmar por un lado y hacer algunas precisiones por otro, sobre el caso de fraude con documentos públicos expuesto por EL TELEGRAFO en las dos anteriores ediciones.
“Quiero aclarar que no hay una oficina paralela (de Tránsito); pudo haberla antes, ahora no. Hay una oficina que tiene un director con diferentes procesos, que fue advirtiendo en diferentes momentos situaciones que las fue acumulando, profundizando la investigación”, agregó Caraballo.
Se refería al titular de Primera Plana de EL TELEGRAFO de la víspera. Confirmó que “luego llegó un particular que proporcionó elementos probatorios con los cuales se pudo proceder a efectuar la denuncia, convencidos de que estábamos ante algo irregular”. La denuncia de referencia fue presentada el 17 de enero pasado, porque “para denunciar hay que acompañar con mínimos elementos probatorios que habiliten a la intendencia elevar el procedimiento a las autoridades”.
Subrayó Caraballo que “estábamos al tanto del asunto, teníamos el control del proceso. Fuimos juntando elementos. Estábamos siguiendo el proceso. La intendencia no perdió el control del tema. Hace varios meses que veníamos atrás de este asunto”.
“Y ustedes no sabían nada de eso”, indicó señalando a los periodistas. Le faltó indicar al intendente departamental que en la misma jornada que cuatro funcionarios municipales fueron demorados y presentados ante el juez, EL TELEGRAFO informó el núcleo del tema con casi todos los detalles que ahora la propia intendencia comprobó oficialmente en la misma conferencia de prensa.

Se retuvo otra licencia

Mario Díaz, secretario general de la intendencia destacó que “todo esto se basa en el incremento significativo de la fiscalización, que ha llevado a la aplicación de una cantidad importante de multas y penalizaciones”.
Horas después, alrededor de las 15, inspectores de Tránsito, en un control de rutina retuvieron otro permiso único de conducir apócrifo, a nombre de N.G.M, de 19 años. El documento público falso le había sido otorgado el 25 de octubre de 2017 para motos y el 15 de noviembre del mismo año para automóviles. Ambos válidos por dos años.
La impresión de excelente calidad, tiene en la parte delantera el escudo de mayor tamaño en tanto las figuras no están bien definidas como en el original. Asimismo, en el reverso, las líneas azules son continuas, lo que en el original es una inscripción. Pero el resto es de excelente calidad. La foto fue tomada con un fondo del mismo color que el original y hasta se duplicó la firma real de Federico Álvarez Petraglia que figura en todas las otorgadas a partir del 9 de julio de 2015. Incluso el código QR puede leerse con una aplicación y lleva a la página del Sucive. No se puede empero, leer el documento final que no se abre apropiadamente.

Guillermo Caraballo, asimismo, aseguró que “cualquier contribuyente de Paysandú, sea blanco, colorado o frenteamplista que sepa de alguna irregularidad, puede venir a denunciar a la intendencia. Al intendente, al secretario general, al director de Jurídica. Se va a tomar, estudiar y si se entiende que corresponde proceder con la denuncia”. (Más información en edición impresa)