Interesante corrida de negocios de lana en cinco departamentos genera “buenas expectativas”

Se registró en las últimas horas “una corrida de negocios” por lana de la firma Moriondo y Cía., del departamento de Salto, que ascienden a cuarto millón de kilos. Esto genera una operativa muy importante para el mercado de nuestro país. De acuerdo con información que recabó EL TELEGRAFO y más allá de que los valores del negocio se mantienen en reserva, la operativa se verificó en los últimos 10 a 12 días, concretada por la firma salteña y por lana de buena calidad, que determina que el interés de los productores en lograr buenos valores por su lana.
Si bien en semanas anteriores hubo cierto movimiento en el sector de lanas finas disponibles y alguna venta puntual de lanas “en el lomo”, a esquilarse en los meses próximos, la baja del mercado internacional y la cautela de los principales compradores de ultramar “también se hizo notar en el mercado interno”, manifestó a EL TELEGRAFO José Luis Trifoglio.
“Lentamente comienzan a quedar prontos algunos lotes de esquila preparto y algunos se han comercializado”, sostuvo el responsable del Departamento de Lanas de Zambrano y Cía. “No obstante, la operativa sigue siendo reducida y concentrada esta semana en lanas Corriedale entre 28 y 28,9 micras, según se desprende de los precios promedio publicados por la Unión de Consignatarios y Rematadores de Lana del Uruguay”.
En lo que respecta a lanas Merino de 21 micras, los valores oscilan entre U$S 8 y U$S 9 los grifa verde. En la medida en que la lana es más fina, las cotizaciones suben. Así es que se han registrado negocios sobre el lomo, por lanas de 19 micras a U$S 11. En la última semana, según informó radio Sarandí, se registró un negocio de 17,5 micras, en el lomo, a U$S 14 por kilo.
“De todas maneras, más allá del lugar que tengan las lanas finas dentro de los planes de la industria, la demanda industrial se ha mostrado cautelosa desde la semana pasada”, explica Tardáguila Agromercados. “Esperando señales del exterior para definir una postura homogénea frente a la oferta de lana local. No hay que olvidarse que los negocios mencionados, han sido puntuales y, por la calidad y finura de la lana, se realizan más allá de la tendencia de la demanda”, agrega.

Exterior

Comenzó una nueva zafra y en las dos primeras semanas de ventas el mercado lanero australiano registró tendencia a la baja, después de haber culminado el 30 de junio la zafra anterior en niveles de precios excelentes. “Varios factores influyeron en esta corrección a la baja, aunque en general se observó que la demanda fue más cautelosa al definir su posición de compra a determinados valores”, explicó Trifoglio.
El Indicador de Mercado del Este bajó nueve centavos de dólares americanos con respecto al cierre de la semana pasada (0,6%) y se ubicó en U$S 14,62 por kilo base limpia, es decir, 51 centavos por debajo del cierre de la zafra 2017-2018. “Sin embargo, cabe destacar que cuando las subastas estaban finalizando, se notó a los compradores un poco más animados, registrándose una pequeña mejora”.
Por ese motivo y por la diferencia en la calidad que se observó en ciertas categorías, “los precios de algunos micronajes fueron ligeramente superiores a otros más finos”, acotó el analista. Analizando los precios en dólares americanos y en comparación del cierre de la semana pasada, “observamos que los vellones de 16,5 a 22 y 28 micras bajaron entre 0,1% y 2,9%. Las categorías de 23, 30 y 32 micras subieron entre 0,4% y 2,2%”.
La oferta totalizó 40.500 fardos y la demanda adquirió el 91,5%, mejorando los niveles de colocación con respecto al registrado la semana anterior. Durante las próximas tres semanas, el mercado lanero australiano entrará en el tradicional receso de invierno y se reanudarán las subastas la segunda semana de agosto.

Hacia el posreceso

José Luis Trifoglio explicó que, en este momento, “hay varias señales conflictivas que circulan por el mundo (económicas y políticas), que representan una gran cantidad de escenarios para la dirección futura de los precios de la lana”.
Entiende que cuando se reanude la actividad comercial en el mercado lanero australiano, después que finalice el receso, “es poco probable que se registre un aumento en la demanda en forma inmediata, debido a que en muchos países compradores de lana del hemisferio norte estarán disfrutando el período de vacaciones”.
Según algunos analistas, de confirmarse esta premisa, en el arranque de los remates de lana, “el mercado podría continuar con un período de corrección a la baja en algunos valores de determinados tipos de lana. Algunos sectores de la demanda están buscando que los precios en el arranque de la zafra se ubiquen en niveles similares a los que se registraron durante los primeros cinco meses del presente año, un poco más abajo que en el cierre de la zafra pasada, pero que fueron muy interesantes”.
Antes que el mercado registrara el alza importante en los precios, principalmente del sector merino medio, “la industria se sentía muy cómoda y el nivel de precios se consideraba sostenible”, indicó Trifoglio. Por lo tanto, “el segmento de Merino mediano podría tener una mayor presión, mientras que el sector de lanas superfinas de muy buena calidad podría comenzar a tener más demanda a medida que la zafra vaya desarrollándose y esto podría aumentar las cotizaciones, mientras que el sector Merino medio vaya corrigiendo a la baja. La solidez del mercado es probable que se comience a visualizar nuevamente a medida que los meses vayan pasando y la escasez de materia prima sea mayor”, finalizó.