La Justicia designó a la Liga de Defensa Comercial (Lideco) como síndico para actuar en el Concurso Voluntario de PILI.
Ahora corresponde comunicar a los acreedores para que se presenten a “denunciar sus créditos”, es decir para establecer sus deudas y montos. El síndico deberá estudiarlas y presentar al juez la lista de acreedores, lo que se conoce como “masa pasiva”, y el inventario o “masa activa”.
En lo que se denomina “masa pasiva” hay créditos especiales, con prenda o hipoteca. Luego siguen los de privilegio general, como los laborales de hasta 260.000 UI por cada trabajador. Seguirán luego las deudas tributarias. En línea de privilegio descendente siguen los pasivos subordinados, incluyendo multas y créditos que tengan relación con el deudor, lo que aparece como muy poco probable en caso de PILI, desde que es una sociedad anónima.
La “masa activa” de la empresa, que será administrada por el síndico, es el activo que tiene la sociedad, la totalidad de su patrimonio, incluyendo inmuebles, maquinaria y cuentas bancarias. Corresponderá a la Lideco determinar qué acreedores formarán la “masa pasiva” atento a lo presentado, así como quienes queden excluidos de esa lista y el inventario de los bienes de la sociedad anónima. Los acreedores, según la ley, tienen un plazo de 60 días para presentarse a verificar sus créditos.
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