Si bien la aparición de casos de leishmaniasis en la zona de Chapicuy es indicador de que la enfermedad está cerca, la situación al respecto en Paysandú no ha experimentado cambios. Es decir, aún no ha ingresado la mosca o flebótomo que sirve como vector de la leishmania.
Los casos registrados en Chapicuy no eran autóctonos de nuestro departamento, sino que se trataba de un perro índice que había sido encontrado en la ruta y adoptado por una familia de la zona. Según dijo a EL TELEGRAFO el doctor Germán Matosas, el perro, raza Boxer, había sido castrado en el marco de la campaña de castraciones de la Intendencia, la Comisión de Zoonosis y Amigos de los Animales. Al enfermar el perro, fue llevado a una veterinaria en Salto para su atención, y al practicársele el examen de leishmania, dio positivo. Dado que presentaba claros síntomas de la enfermedad, fue sacrificado.
Lo mismo sucedió con otros animales que también presentaban síntomas, según se dispuso al efectuarse una intervención en la zona afectada, con la presencia del doctor Eduardo Supparo, integrante de la Comisión de Zoonosis salteña, acompañado por representantes de la Comisión Departamental de Tenencia Responsable y Bienestar Animal (Codetryba). Esta actividad se mantuvo en la más estricta reserva, pues se intentaba evitar la alarma pública, explicaron.
RECOMENDACIONES
Sabido es que la enfermedad ya está instalada en el departamento de Salto, por lo que para evitar que llegue a Paysandú las recomendaciones a tener en cuenta siguen siendo, para los tenedores de perros sanduceros, no viajar a Salto con ningún can. Pero sobre todo es importante evitar el traslado de animales desde Salto. También se aconseja no ir a las zonas termales ni de campamento a zonas costeras con perros, no comprar ni adoptar animales que provengan de esa zona; tampoco de Argentina o Brasil, donde la enfermedad ya es endémica.
Dado que el flebótomo se desplaza “desde la zona ecuatorial hacia el sur debido al cambio climático o la adaptación que está haciendo a estas zonas, habría más posibilidades de que la enfermedad llegue primero a la ciudad de Paysandú que a zonas rurales, a través del río Uruguay”, dijo Matosas, recordando que “en Salto empezó así, en la zona costera”.
Por lo tanto es fundamental la prevención, aunque en algún momento la leishmaniasis también se instalará en Paysandú. Es solo cuestión de tiempo, “no tiene sentido entrar en pánico porque es una enfermedad que llegó al país para quedarse, con el riesgo de que es contagiosa para el ser humano y en el perro es mortal, siendo inevitable la eutanasia”.
