Sorpresivamente, la Federación Uruguaya de Básquetbol cesó al entrenador de la selección nacional de básquetbol Marcelo Signorelli, quien estaba en el cargo desde 2016, trabajando asimismo en un nuevo proceso que involucraba al básquetbol nacional, sus selecciones, viajes al Interior y todo lo ya conocido. La medida obviamente despierta un sinfín de comentarios, comienzan a trascender cosas de las que no se hablaban hasta ahora y se marca un enfrentamiento entre Signorelli y Esteban Batista, y también se hace referencia al vuelo en avión luego del partido jugado en Las Vegas ante Estados Unidos.
Tanto Signorelli como el pivot Batista se expresaron en distintos medios y para el caso hemos tomado conceptos de ambos vertidos en notas realizadas por El Observador y en distintos medios.
“Me quedaron cosas por hacer”
Preguntado Signorelli sobre qué pasa con el básquetbol donde se reiteran salidas de entrenadores y renuncias de jugadores, respondió: “Pienso que tendrían que hacerse una consulta de todo tipo. Siempre han pasado cosas, siempre por una cosa o la otra no se terminan los ciclos. Sin dudas hay culpas compartidas. La Federación es la que hace los procesos, invierte en los procesos. En mi caso ni siquiera fueron cristalizados porque fue un corto plazo, me quedaron muchas cosas por hacer, no me dio el tiempo”.
Y la pregunta de si no hablaba con Batista, trajo esta respuesta: “Se desgastó la relación de un lado y de otro, se desgastó. Quizás hay muchas cosas que quedaron en la intimidad”. Y surge la capitanía otorgada por el técnico a Fitipaldo. “Eso fue un tema importante sin dudas”.
Signorelli habló también sobre el asunto del viaje en avión al regreso del partido en Las Vegas, donde hubo versiones de que viajó en clase ejecutiva y los jugadores en económica. “Al regreso el presidente de la FUBB me dice que hay tres pasajes enejecutiva y le respondí, vamos a darle esos asientos a los jugadores. La azafata lo autorizó y ellos vinieron en ejecutiva. Luego de la escala en Panamá volvimos a gestionar para que los grandes vinieran en ejecutiva y nosotros en la económica. Luego de despegar la azafata nos pidió que nos cambiáramos de asientos. Yo después me dormí, pero ningún jugador vino a reclamar nada”.
“Yo no tengo nada que ver”
Esteban Batista, el pivot de la selección nacional, también tuvo la oportunidad de expresarse sobre este tema que sacudió el ambiente del básquetbol, y por ejemplo dijo que no tiene nada que ver con el alejamiento del entrenador a quien acusó de tener “una fábula considerable”. “No tengo mucho para decir. Me extraña la manera cómo se manejó el tema”. “El sabe muy bien lo que pasó, yo no soy torcido, yo voy derechito y de frente. Hablo en la cancha y hablé en el último cuarto contra México. Ahí demostré mi lealtad al compromiso de la causa de la selección. Lo que piense de conspiraciones está muy lejos de mi proceder. Hace muchos años que peleo y doy la cara por Uruguay”, añadió.
Y lo del tema del capitanato. “No, hace dos años que tengo mal relacionamiento con esta persona y yo me guardo lo dicho, se lo dije a él muy claramente en la cara”.
