Huracán sabe que tendrá una bala más en la recámara a la hora de afrontar la definición de la temporada del fútbol sanducero de Primera División. El equipo que dirige Ramón Silvera quiere cerrar el espectacular año deportivo con otra vuelta olímpica, después de haber sido campeón de la Copa Nacional de Clubes de OFI de la Divisional B, campeón del Apertura doméstico y también de la tabla anual.
Es por eso que tendrá la posibilidad, en caso de que no gane la Liguilla que jugará junto a 18 de Julio, Amanecer y Progreso, de disputar una finalísima ante el ganador del último torneo del año, para definir al campeón de Honor.
“Sabemos que tenemos una chance más, que es producto del trabajo realizado a lo largo del año. Pero nosotros vamos a salir a buscar el campeonato”, reconoció Silvera. Este Huracán no deja de sorprender. Ante mil y una carencias, saca pecho. No en vano llega por tercera vez consecutiva a la definición de la temporada. “¿Cuál es el secreto? Es un plantel con algunos muchachos de experiencia y también con juventud. Pero la unión del grupo es la clave”, dijo.
Y se explayó sobre el tema: “Es un grupo que participó en base a esfuerzo en la Copa Nacional, porque fueron ellos los que solventaron la presencia de Huracán. Y un grupo que se levanta temprano para hacer pasteles y así conseguir el dinero para competir, debe salir de una manera por demás especial a la cancha. Estos jugadores entran de otra manera a cada partido”. El equipo tendrá tres bajas, pero seguramente este Huracán se sobreponga a las dificultades.
“Será una Liguilla pareja, con buenos equipos. Por supuesto que acá entramos todos con chances iguales y no hay favoritos. Creo que el que cometa menos errores tendrá chances de llevarse la Liguilla y estar en la definición del campeonato”.