Consultado sobre el problema que denunciaron a través de las redes los vecinos del barrio Gamundi-Solari, el director general de Obras, Marcelo Romero, indicó a EL TELEGRAFO que “no hemos recibido ningún reclamo en cuanto a que por la obra algo haya funcionado mal. Sino que lo hizo normalmente”. Vale destacar, dijo, que se trató de un evento “muy importante en cuanto a volumen de agua en poco tiempo que siempre provoca problemas en varias áreas de la ciudad”.
“Sí sabemos que de Rodríguez Nolla al Este, donde no hubo obra y debemos seguir trabajando para mejorar esas situaciones, hubo algún inconveniente con alguna canalización que no está del todo resuelta y tratamos de mantener y convidar a los vecinos a que mantengan su cuneta. En el caso particular, nos llega por otros medios que no son los adecuados para rápidamente tomar el planteo, estudiarlo en el momento y ver si es una problemática asociada a la obra, que no lo es, o si puede tener algún otro tipo de solución incluso en el momento”.
De hecho, precisó Romero, en ese barrio “hay una boca de tormenta que no sabemos qué situación pasó pero había hasta una baliza tirada adentro de la propia toma de cuneta. Entonces eso provocó, indudablemente, alguna alteración en cuanto al escurrimiento del agua”.
A su vez, aclaró que se enviarán técnicos “porque cuando se hacen intervenciones, sea en el área propia o aledañas, si hay cosas para solucionar, lo hacemos”.
En algunos casos, “es muy difícil cuando el nivel en que está construida la casa está mucho más abajo que el cordón cuneta o la calzada de la casa, porque no es problema de la calle ni de la obra, sino de cómo se construyó la casa y que no tuvo en cuenta los niveles adecuados para permitir que el agua salga como debería. Igualmente, en esos casos, tratamos de buscar una solución que por lo menos mitigue la situación y que la gente no se vea en una situación complicada que no se sabe cómo resolver”.
“Reitero –dijo el director general– en el caso de la obra misma, en la Proyectada 91, 14 y Ayacucho, donde había problemática desde hace décadas, la obra de Gamundi-Solari funcionó muy bien. El agua subió hasta el tirante del cordón, es decir hasta la altura, pero no tenemos reclamo. Puede haberse dado alguna situación que la iremos evaluando a medida que tengamos constatación de eso. En general, de acuerdo a lo previsto, la canalización del arroyo escurrió mucha más agua que lo que venía sucediendo”.
Obras con dificultades
La otra zona afectada, dijo Romero, fue la de barrio Sur. “Aunque vemos como una intencionalidad de unir la obra con la problemática que antes no existía. Cuando en realidad es al revés, la obra se hace para solucionar el problema y si hay otras situaciones que también se buscan mitigar”, señaló.
“Estuve por varios lugares de la ciudad”, dijo pasadas las 22 a este medio. “Pasé nuevamente por Gamundi-Solari, por Entre Ríos desde Soriano hasta Park Way donde estamos haciendo obras y hubo algunas casas que se inundaron. Estuve hablando con los vecinos en los mejores términos. Esa es una obra que está en ejecución, por lo tanto no está funcionando a pleno, pero algunas casas están en un nivel más bajo, por lo tanto se hace difícil que el agua que cae del terreno se evacue hacia la calle. Veremos qué solución complementaria podemos hacer porque es una problemática que parte de cómo se construyó la casa”. Alguna otra situación, explicó, se dio allí mismo porque es una zona “donde hay montículos de tierra y arrastre de materiales”. “Tiene poca pendiente y eso hace que el agua se detenga e ingresa a algún domicilio en particular. En la medida que se siga con la obra se va ir a solucionando y si se dio por alguna entrada vamos a generar alguna obra complementaria”, sostuvo.
“Por lo que estuve conversando con los vecinos esto pasó en el primer tramo de la obra, es decir de avenida Soriano hasta antes de llegar a Bicudo. También por Silverio Martínez donde está la cortada de la policlínica hubo algún inconveniente que tiene que ver con la obra no terminada.
