Hay dos salas quirúrgicas habilitadas en el hospital, aunque aún con falencias

Pese a no estar definitivamente prontas, dos de las cuatro salas de operaciones del Hospital Escuela del Litoral fueron habilitadas en principio para el uso de urgencias, mientras que las operaciones coordinadas comienzan a hacerse también desde ahora en estas salas.
“No es una rehabilitación total, es una modificación de la estructura que nos permite operar nuevamente”, dijo a EL TELEGRAFO la directora del HEL, doctora Ángela Almeida, detallando que “con el aporte que hizo la Intendencia sumado a lo que estaba previsto por ASSE para la impermeabilización del techo, se hizo el arreglo de las salas con nuevo revestimiento”.
Aclaró que “esta fue la primera etapa de obras, la segunda será la modificación de las salas 3 y 4, que va a quedar en una sola, con una sala de recuperación, que ahora no tenemos. Y la parte de vestuario para el personal que va a ocupar una parte de urología, que está justo debajo de esa área”. Actualmente el vestuario está junto a la sala de operaciones y también tiene un baño con ducha.

Operarán de mañana y de tarde

Sobre si con estas modificaciones ya no será necesario contratar a otros prestadores, Almeida dijo que “ya se empieza a trabajar, con menos cantidad de salas que antes, por lo que tendrá un ritmo más lento. Y para optimizar los recursos, se utilizará en la mañana y en la tarde”, por lo que no sería necesario. En cuanto a cuándo las salas de cirugía podrán estar prontas y en óptimas condiciones, se indicó que “como máximo a fin de año estaría toda la obra completa”, y que “en dos meses sale la licitación”.
Sobre las aberturas, que son de madera y ya no se utilizan en los quirófanos, “quedaron por ahora, cuando se vuelva a trabajar se cambian”, y un equipo acondicionador de aire que se vio mal ubicado (daba directamente sobre la mesa de operaciones) afirmó que “se cambia hoy mismo para que no le dé al paciente”.
Aún falta también terminar de impermeabilizar la azotea, que “se dividió en planchas, y aún no está todo cubierto, como el pasillo de ingreso, que aún tiene manchas de humedad a la vista”.

Aún con falencias

Fuentes médicas consultadas por EL TELEGRAFO aclararon que la obra es una refacción –del orden de los “50 mil dólares”– que no alcanza a cumplir con todos los requisitos que exige el Ministerio de Salud Pública para una obra nueva. A modo de ejemplo, el equipo de aire acondicionado es del tipo split de uso hogareño –el mismo que equipaba la sala antiguamente–, de marca nacional, y no cuenta con los filtros EPA exigidos. Para suplir esa carencia se instaló un purificador de aire externo. Por otra parte, las aberturas son de madera en lugar del acero inoxidable o aluminio que corresponde a la norma, y los herrajes son los viejos de hierro a los que se les quitó el óxido y pintó la superficie.
Por otra parte, llamativamente hay un baño cuya puerta “da a la antesala de las salas”, que no corresponde para un área que debe mantenerse lo más estéril posible.
En tanto, otra fuente manifestó que “el próximo paso es poner el piso vinílico” y reconoció que “Salud Pública es muy benigna con ASSE”, aunque asegura que esta vez la obra cumple con los estándares básicos de seguridad porque “el Comité de Infección Intrahospitalaria se puso” firme en los controles. Dijo que esta habilitación responde a “una emergencia” porque una situación límite no puede esperar por un traslado a otro centro para una intervención quirúrgica.