Un mes de cárcel para hombre que mostraba sus genitales a menores

La Justicia condenó a un hombre de 51 años a un mes de prisión efectiva tras comprobarse su responsabilidad al exhibir sus genitales a niños y adolescentes de Quebracho. El hecho que motivó la denuncia ocurrió el 7 de febrero, pero luego de ésta se sumaron al menos cuatro testigos que aportaron que esa no era la primera vez en que ocurrían este tipo de actos.
De acuerdo a información recogida por EL TELEGRAFO, un hombre denunció ante la Comisaría Sexta que su vecino salía a diario a orinar a la vía pública, haciéndolo a la vista de menores y mayores, a quienes les chistaba para llamar la atención.
Cuando lograba que lo miraran, se tomaba los genitales y profería frases obscenas. La Policía informó a Fiscalía lo que estaba ocurriendo y de inmediato se montó un trabajo de campo para reunir mayores pruebas.
La situación fue corroborada por al menos cuatro vecinos más. Uno de ellos dijo que días antes cuando sus pequeños hijos concurrieron al almacén –junto a la casa del depravado– éste los llamó, se bajó los pantalones y comenzó a tocarse el pene, por lo que los niños salieron despavoridos hacia donde se encontraba su madre.
Otra señora indicó que en varias oportunidades, cuando su hija adolescente se dirigía al almacén, el hombre se desnudaba, tomaba su miembro y la acosaba verbalmente, por lo que la jovencita ya no quería salir de su casa por miedo a lo que pudiera pasarle. En igual sentido, otra personas de la cuadra expresaron que en reiteradas oportunidades habían visto al hombre desnudo y exhibiendo sus genitales a quienes pasaban por el lugar. Los vecinos manifestaron estar cansados de la situación, sobre todo ante la presencia de niños y adolescentes en el barrio.
En tanto, la Fiscal de Cuarto Turno, Cecilia Irigoyen, dispuso que el hombre fuera detenido y conducido a su despacho.
En la órbita penal, se resolvió condenar a O.O.G.M. por “reiterados delitos de ultraje público al pudor”, a la pena de seis meses de prisión que cumplirá con un mes de cárcel efectiva y cinco meses en régimen de libertad vigilada, consistente en arresto domiciliario nocturno, de 22 a 7, y la prohibición de comunicación y relacionamiento con los denunciantes y testigos identificados.