“Cuanto menos recursos le saquemos a los uruguayos y más estén en poder de ellos, más va a crecer el país”

Luis Lacalle Pou, el precandidato a la Presidencia de la República que encabeza la intención de voto según la mayoría de las encuestas, reafirmó en entrevista con EL TELEGRAFO que puede ahorrar 900 millones de dólares con buena gestión; que pretende modificar el sistema jubilatorio pero respetando las reglas ya establecidas para quienes están cerca de acceder al retiro; que está dispuesto a renegociar el acuerdo de UPM en todo lo que jurídicamente sea posible; y que si obtiene la interna le corresponderá al resto del Partido Nacional sugerir quien será su compañero de fórmula.
“En esta campaña electoral no hable de los números económicos negativos, o es un inconsciente o no le está diciendo la verdad a los uruguayos”, dice y agrega que “hay una cruz de caminos que el déficit fiscal se arregla con más impuestos, otros creemos que con ahorro público y mejor gestión de los recursos. Y sostengo, y me lo confirmó una entrevista a Daniel Martínez y después el programa de gobierno del Frente Amplio, que ese partido puede insistir en esta lógica de más impuestos y tarifas públicas”.
Recordó que el ministro de Economía Danilo Astori “ha dicho más de una vez que entiende que las tarifas públicas son un mecanismo de recaudación y le asigno a ese ejercicio del Frente Amplio estos años gran parte de la situación económica por la cual estamos atravesando”. Ante ese criterio, el líder del sector Todos indicó que “si después de 16 años de crecimiento ininterrumpido en el país (como afirma el gobierno) tenemos más deuda que van a pagar nuestros hijos y nuestros nietos, inflación fuera del rango metas, récord de empresas en concordato, el desempleo más alto de los últimos 12 años, más gente viviendo en asentamientos y algún otro registro negativo más ¿a qué se debe?. La respuesta es simple: a que se ha presionado mucho sobre el sector productivo del país, con los costos de producción, lo que hace a los impuestos, a las tarifas y al precio de los combustibles”.
El senador por el Partido Nacional, de 45 años, subraya que quien “insista que en Uruguay hay lugar para más impuestos, mayor aumento de tarifas y de combustible, lo único que va a generar es más cierre de empresas y más desempleo. Eso dice el programa del Frente Amplio y lo que dejó entrever Daniel Martínez, con lo cual quedan claramente marcados dos caminos a seguir. El nuestro, del ahorro financiero, del respeto de los impuestos que pagan los uruguayos. En nuestro programa dejamos establecido cuánto y cómo vamos a ahorrar, pero además en qué vamos a volcar ese ahorro, para mejorar el resultado fiscal y para aflojarle el cinturón a los uruguayos, en tarifa eléctrica y combustibles, determinantes para el costo de vida de cualquier emprendimiento y cualquier familia”.
Una de las preocupaciones claves de Lacalle Pou, cuando quedan nueve meses de gobierno es que “el gobierno desensilló y dejó las riendas en el piso. Estamos en el medio de una tormenta y el capitán está durmiendo la siesta”.
Y como “la vida de los uruguayos es demasiado importante para cada cinco años prometerle que todo va a mejor”, compartió “que la gente esté enojada y molesta con los dirigentes políticos. Es lógico que lo esté, pero cada uno con su responsabilidad. Yo no me dedico a tirar piedras, sino a presentar propuestas todos los años, con el cómo hacerlas y con qué beneficios”.
Aseguró que “en este gobierno la filtración por mal gasto es de 2.000 millones de dólares, casi lo que se recauda por IRPF. Entonces ¿quién puede negar que se pueden ahorrar 900 millones de dólares gestionando mejor? Es una obligación moral para los gobernantes gestionar mejor los recursos que pagan los uruguayos y una obligación aflojar el cinturón de los uruguayos”.
Propone 26.166 bajas al año en funcionarios públicos y no llenar el 21% de esas vacantes, lo que daría unos 100 millones de dólares al año de ahorro. “Si no entendemos que al Uruguay lo hacemos grande los uruguayos y no los gobiernos, no entendimos nada y por eso cuanto menos recursos le saquemos a los uruguayos y más estén en poder de ellos más va a crecer el país”, aseguró.

Una reforma necesaria

En cuanto al sector pasivo, “las jubilaciones indecentes de 10.000, 11.000 pesos, por debajo del nivel mínimo de supervivencia digna no pueden continuar. Hay que hacer aumentos diferenciales para que esos jubilados dignifiquen esas pasividades muy sumergidas”.
Por otra parte, es partidario de una reforma del sistema previsional “en un plazo menor a un año, con técnicos de diferentes partidos políticos, porque se ha tornado insostenible. Eso sí, sin alterar las condiciones con las cuales uno empezó a trabajar, no subirle la edad mínima a quienes ya están trabajando. Si generarle estímulos para que se jubilen a edad más avanzada, en un país donde el promedio de jubilación es de 63 años”.
“Otro mecanismo es permitirle a los jubilados que sigan trabajando si lo quieren hacer. Me he encontrado con un sinnúmero de uruguayos que quieren jubilarse pero no lo hacen porque no pueden continuar desarrollando actividad remunerada”.

Buena para UPM, mala para los uruguayos

También consultado por la segunda planta de UPM en el país y todo lo que el tema conlleva, recuerda que “hace dos años llamé a sala a cuatro ministros porque leí el supuesto contrato, que es una hoja de ruta, y me preocupé porque tiene 32 obligaciones para Uruguay y ninguna para UPM. Y por curiosidad fui al acuerdo que firmó Batlle (para la primera planta UPM). Eran dos carillas, cuatro obligaciones para UPM y una para Uruguay”.
“Mi preocupación es que el Uruguay, cuando se sentó a negociar con UPM, por un lado estaba UPM defendiendo a la empresa y por el otro al gobierno uruguayo defendiendo a la empresa. Es decir a la ciudadanía uruguaya nunca se la defendió. Fue un error porque UPM igual se iba a instalar, me lo habían dicho en 2014. Tiene la materia prima acá, una planta instalada, la institucionalidad uruguaya le da certezas y Uruguay le da zona franca. Y mundialmente había una ventana de 6 años para la instalación de otro jugador grande porque el mercado de ese producto está creciendo. ¿Qué necesidad había de que Uruguay acceda a todo estos pedidos? ¡Ninguna!
Se comprometió a que, si llega al gobierno, renegociará “todo lo que sea jurídicamente posible. Lo voy a hacer para beneficio de todos los uruguayos,. Estoy a favor de la instalación de UPM, pero creo que fue una pésima negociación del gobierno uruguayo. Buena para UPM, mala para los uruguayos”.
PIE, NO MANO
También afirmó, suponiendo que gane la interna, que “será como en truco, seré pie, no mano. Los otros compañeros del partido serán mano. Les correspondería a ellos sugerir no solo quien puede ser un buen candidato, sino un buen vicepresidente de la República. Ese es el gran desafío, porque el periodo que viene va a tener un laburo enorme quien ocupe la Vicepresidencia”.